TORREÓN | DEBE EL CIUDADANO PAGAR 16 PESOS POR CADA COPIA
EL SIGLO DE TORREÓN
Es necesario que el Municipio y el Congreso Estatal reconsideren la tarifa en la Ley de Ingresos
TORREÓN, COAH.- Aunque está garantizado el derecho a la información sobre cualquier tipo de actividades de la Administración Municipal en esta ciudad, el costo para el ciudadano resulta de los más caros en el país y esto aparece como uno de los principales obstáculos en el ejercicio de ese derecho.
Miguel Ángel Ordaz Espinoza, consultor externo del Instituto de Transparencia Municipal, señala que uno de los inconvenientes que tiene la Administración Municipal para proporcionar copias al ciudadano de la información que solicita, es el alto costo aplicado, pues por una copia simple cobra 16 pesos, aunque ya se solicitó al Gobierno Municipal que reconsidere la tarifa en la Ley de Ingresos, lo cual deberá ser aprobado por el Congreso Local.
En el ámbito federal la copia simple cuesta un peso pero en otros lugares, como en San Pedro Garza, Nuevo León, tiene un costo entre 30 y 35 centavos la copia y en Torreón, si no es el más caro en esta materia, sí es de los más caros.
¿Para qué sirve?
El Instituto de Transparencia Municipal es un órgano desconcentrado y autónomo para operar, definir y decidir. No depende del Gobierno Municipal, aunque el presupuesto lo determina el Ayuntamiento con recursos de carácter público y se somete a las mismas reglas para la comprobación del ejercicio del propio presupuesto.
Ordaz Espinoza explica que los primeros cinco Comisionados del Instituto fueron propuestos por el Alcalde y aprobados por el Cabildo, de acuerdo al procedimiento definido para tal efecto.
Los comisionados son representantes de la sociedad, se dedican a cuestiones diferentes, no dependen del municipo y sus cargos son honoríficos, es decir, sin sueldo. El cargo es de cuatro años y el propio Consejo es presidido durante un año por uno de ellos designado de manera democrática por los mismos y puede ser reelecto por otro período igual.
Las atribuciones principales del Instituto son todas aquellas relacionadas con la promoción y difusión acerca del conocimiento de lo que es el derecho de acceso a la información, pero también con respecto al ejercicio de ese derecho.
El Instituto de Transparencia Municipal es un interlocutor y a la vez representante de la sociedad con respecto al Gobierno Municipal, desde el punto de vista de lo que el Gobierno hace y de lo que la sociedad debe conocer.
La relación que el Instituto tiene con la sociedad, refiere el consultor, es decirle; aquí hay un organismo de carácter público que está a su servicio y su principal tarea es decirle que tiene derecho a ser informado sobre lo que haga cualquier oficina de Gobierno y además, que la información sea copia de un documento, no respuesta mediante oficio.
Es la herramienta
Para el presidente comisionado del Instituto, Arturo Gallegos Salcido, el tener acceso a la información es la herramienta de los ciudadanos que permita llegar al fondo del manejo de los recursos públicos y de las decisiones de la Autoridad.
?Es una herramienta que debemos de aprender a manejar. Es la pequeña gran Reforma del Estado impulsada por el Presidente Fox y que está permeando a los Gobiernos Estatales y Municipales. El solo hecho de decir, ?no soy dueño, sino un servidor público y debo rendir cuentas?, es un cambio de actitud total, que nosotros como ciudadanos debemos, mejorar, conducir y sobre todo, no dejar morir?.
La sociedad, dice, desconfía de sus Gobiernos y con esto se abre la posibilidad de recobrar esa confianza en los gobernantes. En donde hay dinero público, expresa, siempre se habla de corrupción, pero si alguien tiene una duda y se queda con esa duda, le provoca malestar o inconformidad, cuando tiene la oportunidad y el derecho de llegar al fondo y de manera transparente satisfacer la curiosidad sana de comprobar si las cosas se hacen bien.
De hecho, algunas constructoras solicitan ya información sobre las licitaciones, al igual que otro tipo de proveedores de la Presidencia Municipal. ?Esta cultura debe ser impulsada y los medios de información juegan un papel preponderante?, dice Ordaz Espinoza.
El consultor reconoce que hay una apreciación ciudadana generalizada, que forma parte de la cultura de muchos años. ?Nos educaron para pensar que las cosas van a cambiar de forma automática con la ley, pero no es así, los ciudadanos tenemos que empujar para que la norma se aplique. Este es un derecho que si no se ejerce, se va perder?.
Para que la parte obligada entregue información, dice, el ciudadano tiene que exigir su derecho y si no lo hace, la otra parte no se va preocupar por llevar todas las cosas en regla, pero no se debe conformar con que le digan cuáles fueron los programas aplicados, sino ver los efectos de esos planes y programas. ?Qué tan bien se utilizó el dinero en esos programas?.
La rendición de cuentas, enfatiza por su parte el Presidente del Instituto, es parte integral del manejo del dinero público. Este es un recurso que debemos aprovechar, pues además no tiene costo, es decir, la información no se cobra, sino el material que se utiliza y que en la actualidad es caro, pero eso se va modificar pronto.
¿Cómo solicitar información?
Para solicitar información pública hay que dirigirse a ventanilla de la Dirección General de Modernización, ubicada en la planta baja de la Presidencia Municipal, por medio de los formatos correspondientes.
La Dirección General de Modernización es la encargada de turnar la petición a las Direcciones Municipales correspondientes, cuyos titulares deben conocer los tiempos perentorios para responder cualquier petición. El plazo es de 20 días hábiles máximo para entregar información que no sea clasificada como confidencial o reservada, y aún así se debe dar respuesta que está clasificada y los motivos.
Si en un momento dado, el ciudadano no está de acuerdo con la información que recibe o con la negativa de la dependencia municipal, puede inconformarse en el Instituto, que se encuentra en el Archivo Histórico, ubicado en calle Acuña, entre Morelos y Matamoros, donde será asistido en todo el procedimiento para hacer valer su derecho.
Al existir la inconformidad de un ciudadano, el pleno se reúne para discutir y analizar lo procedente y valora a quién le asista la razón. Si a criterio del Instituto la información solicitada no es clasificada, el Instituto tiene facultades para obligar a la dependencia a entregar la información.
Para Gallegos Salcido, es extraordinaria la oportunidad que tiene la sociedad y los medios de comunicación para obtener la información que consideren importante, sobre los manejos de los recursos o las actividades que realizan las distintas dependencias municipales.
Las sanciones para los servidores públicos que se nieguen a proporcionar la información requerida por los ciudadanos, precisa el consultor externo, están previstas en la Ley de Responsabilidades y pueden ir desde las amonestaciones hasta la inhabilitación en el cargo.
LA RUTA
El 28 de febrero de 2003, el Cabildo aprueba de manera definitiva el Reglamento de Transparencia
y Acceso a la Información Pública del Municipio de Torreón.
El 16 de abril de 2003 el Reglamento se imprime en la Gaceta Municipal.
El seis de junio de 2003 se publica en el Periódico Oficial del Estado
El dos de octubre del mismo año se propone a los Comisionados para integrar el Instituto de
Transparencia Municipal
El nueve de octubre se aprueba el Presupuesto del Instituto
El 24 de noviembre se toma la protesta a los Consejeros del Instituto
El nueve de diciembre se celebra la primera sesión ordinaria del Consejo
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón