El Siglo de Torreón.
TORREÓN, COAH.- El matador lagunero Jorge Mata obtuvo un gran triunfo en el festival taurino celebrado ayer en la Plaza La Alejandra de la ciudad de Durango, en donde cortó dos orejas al novillo “Triunfador”, de la ganadería de Arturo Gilio Handam.
Jorge fue el quinto espada de la tarde, hizo efectivo el dicho de que “no hay quinto malo”, con el capote logra una serie de verónicas, para luego hacer un quite por chicuelinas antiguas, el cual fue muy aplaudido por los asistentes al coso duranguense.
Con la muleta consigue una faena de mucha calidad, con la mano derecha logra pases de todo tipo, ante la entrega del público duranguense se tira a matar, en el primer viaje falla con la espada, en el segundo pega una estocada que hace doblar al novillo.
Al grito de ¡torero, torero! la gente pide dos orejas para el matador lagunero, las cuales concede el Juez de Plaza.
El triunfador de la tarde fue el torero hidrocálido Pedro Montes, a quien le toca un novillo bravo y complicado, pero con mucha clase y calidad, también de la ganadería de Arturo Gilio Handam.
Montes logra una faena muy variada con capote, banderillas y muleta, a la hora de matar ejecuta una estocada entera, el Juez de Plaza no duda en premiarlo con dos orejas y el rabo.
Fermín Espinoza “Armillita” realiza una faena de mucha calidad, pero desafortunadamente falla con el acero al matar al novillo de Santa Bárbara, lo justo hubiera sido una oreja, sin embargo el Juez no la concede, tan sólo sale al tercio.
Antonio Urrutia desarrolla una faena de tesón ante un novillo difícil y bravo de la ganadería de Arturo Gilio Handam.
Manolo Mejía enfrenta a un burel de casta y bravura, el cual termina muy pronto su recorrido, sin embargo, hace una faena de mucho aseo y maestría, pero falla en dos ocasiones con la espada, tan sólo logra salida al tercio.
José María Luévano, figura del toreo mexicano, realiza una faena de mucho valor y arte, la cual es recompensada con una oreja.
Los novillos fueron tres de la ganadería de Santa Bárbara y tres de Arturo Gilio Handam, quien a petición del público sale al tercio, en reconocimiento a la calidad de sus novillos.
