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CANNES, FRANCIA.- La actriz Uma Thurman interrumpió su sesión de bronceado en la terraza del lujoso hotel Majestic de la Costa Azul francesa para conversar acerca de Kill Bill Vol 2, así como de muchas otras cosas que rodean su carrera como actriz, de la que, asegura, se siente "plena y feliz".
Lo primero que sorprende de esta moderna samurai es su altura, que fácilmente rebasa el 1.75 centímetros de estatura. Después llaman la atención sus ojos verdes que tienen una frescura única y, finalmente, lo estilizado de su cuerpo.
Pareciera que la originaria de Boston es una mujer frágil, pero nada más alejado de la realidad, porque dentro de sí, la protagonista de películas como El Pago, Gattaca y Batman y Robin lleva una furia que puede estallar en cualquier momento y a la menor provocación.
Pero hoy no es ese día, Uma aparece descalza, con un vestido rojo y con su cabello rubio mal recogido con un pasador. Antes de iniciar la entrevista, lanza algunos comentarios acerca de la edición 57 del Festival de Cannes, la cual, dice, está disfrutando como nadie, aunque no tanto como aquel 1994, cuando junto con Quentin Tarantino y John Travolta, se llevaron la Palma de Oro por Tiempos Violentos (Pulp Fiction).
Han pasado exactamente diez años, ahora la vida la colocó nuevamente enfrente de la lente de Tarantino y junto a Travolta en la comedia Be Cool, que terminó de rodar hace apenas unos días.
-¿Cuál es la diferencia entre el Tarantino de Pulp Fiction y el de Kill Bill?
- Que ahora tiene más dinero y más libertad para sus películas... siempre ha sido libre, pero ahora sus cintas son más caras, tienen mayor audiencia. El dinero le da la posibilidad de que sus ideas y sus sueños los pueda llevar tal y como los quiere a la pantalla.
Su amistad con Tarantino (ahora presidente del jurado de Cannes) cumple también diez años, tiempo durante el que han filmado tres películas y han sufrido de todo al intentar mantenerse al margen del Hollywood comercial y vacío.
"Llevamos una relación muy intensa, él siempre será especial para mí y parte importante de mi vida", añade la actriz, mientras juguetea con unos lentes de sol y pide permiso para prender un cigarro light. Luego continúa su reflexión acerca de Kill Bill 2:
"Lo más difícil para mí fueron las batallas, porque eran más complejas de lo que me imaginé. No tuvimos ningún accidente ni nada por el estilo, porque se trataba de un baile, una danza de la pelea, además tuve magníficos coreógrafos y cuando veo la película no puedo creer todo lo que me enseñaron".
Thurman también recuerda los días de rodaje en las playas de Careyes en México, las cuales calificó como "el mejor lugar en donde podía terminar Kill Bill".
"Pasamos momentos maravillosos en Careyes. Fueron unos días increíbles porque ahí filmamos el final de la película y México es un destino mágico, así es que fue el mejor lugar que pudimos tener para acabar nuestra aventura", señala El próximo 20 de mayo, con su personaje, The Bride, continuará su camino de venganza en Kill Bill vol 2, en la que por fin se enfrentará a Bill (David Carradine), quien fracasó en su intento por asesinarla. Desde que despertó del coma no piensa en otra cosa más que en tener la cabeza de Bill entre sus manos, aunque antes tenga que eliminar a sus ex colegas Budd (Michael Madsen) y Elle Driver (Daryl Hannah).
Y es precisamente Carradine, quien trabajó en tres películas del sueco Ingmar Bergman, quien adelanta que Tarantino tiene en mente hacer una precuela y dos secuelas de "Kill Bill". La primera sería completamente por animación tradicional, mientras que las segundas narrarán la venganza de la hija de Vivica Fox y posteriormente de la hija de The Bride.
- ¿Estarás en la secuela de Kill Bill? (es la última pregunta que recibe Thurman antes de que su publicista anuncie que el tiempo se ha terminado).
- Ya veremos, no lo sé, porque hay muchas cosas que pueden pasar antes de eso. Por lo pronto, vean "Be cool", porque es una comedia muy divertida, y he estado muy ocupada con eso, ahora quiero tomar un tiempo para mí. Me siento muy bien como actriz, siento que voy avanzando, amo lo que hago, me siento bendecida.
Soy muy feliz con mi hijo, y quiero dedicar más tiempo a él", concluye.
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Orgullosa de ser la peor vestida
La actriz estadounidense Uma Thurman afirmó estar orgullosa de haber sido elegida la mujer peor vestida en la noche de los Oscar y agregó que se trató de ?un acto planeado?.
Thurman explicó que se vistió ?de forma ridícula a propósito? durante la fiesta de entrega de los Oscars, en Los Ángeles, para lograr rebelarse contra ?la misma basura mediática de estilos?.
?Siempre es lo mismo, todos pelean por tener el mejor vestido y por lucir mejor. Todo el mundo luce igual, con esos vestidos de gala hasta los zapatos con colores extravagantes?, declaró la actriz, que en la actualidad está de novia con el empresario Andre Balazs, dueño del exclusivo hotel de Beverly Hills, Chateau Marmont.
?Me aburrí de lo mismo cada año, por eso decidí ser la peor vestida y lo logré. Estoy muy orgullosa por haber ganado este premio porque creo que me lo merecía?, finalizó.