De la noche a la mañana, Jared Borgetti no se acoplará con Dorados de Sinaloa. Vimos el partido que sostuvo este equipo ante Cruz Azul y en un principio el ariete, que conserva en su nueva camiseta el número 58, andaba en busca de balones para hacer daño.
Y es que todavía no hay quien se acople a su estilo de jugar, algo que tan bien tenía establecido con Rodrigo Ruiz. Seguramente Alexandre Gimaraes, su nuevo técnico, tendrá que hacer modificaciones en el sistema de juego para aprovechar la efectividad de Jared.
Eso le pasó a Borgetti en la Selección, hasta que se entendió la forma en que el goleador puede hacer daño. Y el que está jugando bien y anotando goles es Enrique “Rifle” Vizcarra, ahora con Lobos BUAP, mientras que de Paraguay se reporta Gustavo de Villa Jr. militando con el Sol de América.
En 1960, Roma, la ciudad eterna, fue la sede de los Juegos Olímpicos, haciendo su aparición en ellos la maravilla de la televisión, que llevó al mundo las hazañas de los nuevos ídolos, que derrumbaron marcas por racimos, dando un paso gigantesco en este renglón.
Esta vez la supremacía la acaparó la Unión Soviética, que arrebató muchas preseas antes conseguidas por los Estados Unidos. Ralph Boston pulverizó la marca dejada por Jesse Owens en atletismo mientras que en mujeres Wilma Rudolph ganaba el mote de “La Gacela Negra”.
Roma maravilló al mundo con una perfecta organización y su bella imagen llevada a todo el orbe serviría desde entonces para filmar ahí películas, aprovechando sus calles, edificios y todo lo hermoso guardado en sus siete famosas colinas.