La victoria del Santos Laguna ante las Chivas llega como bálsamo bendito porque vuelve a meter al equipo de la Comarca en la lucha por la calificación, en un torneo donde los movimientos en la tabla ocurren en forma contundente con un par de victorias o derrotas.
Además, el porcentaje de los Guerreros en esta temporada se estaba yendo hacia abajo en forma alarmante, lo que podría causarle problemas en la siguiente temporada, si es que no se siguen aumentando los guarismos que hoy tienen apenas 1.3953.
Por fin en el Corona se vieron algunas cosas que ocurren en Santa Rita. Parecía la del domingo una práctica alegre y elocuente de lo que es el trabajo de conjunto, donde todos atacan y defienden y sobre todo se aprovechan las oportunidades para anotar.
Pero no deben ponerse a repicar campanas los verdiblancos. Hay muchas cosas por corregir, como se vio el domingo en la primera parte, perdiendo balones y teniendo algunos descuidos a la defensiva, lo que afortunadamente no capitalizaron las Chivas.
Cada gol que se le anotó al rebaño tuvo su grado de espectacularidad, empezando con el del ?Misionero?, los dos de Vuoso y el de Rogelio López teniendo encima a Salvador Carmona. Ahí, el muchacho de Monclova pudo al fin mostrar de lo que es capaz.
También hubo reconocimiento para el trabajo de Adrián Martínez. ?El Grande? regresó de Aguascalientes no sólo más delgado sino con mayores deseos de mostrar que sigue siendo uno de los mejores arqueros de México. Y el más feliz de todos el domingo: ?Yayo? De la Torre.
