Santos, que estaba jugando un buen partido, ganándolo con dos muy buenos goles, uno de Matías Vuoso con un autopase por izquierda y otro de Édison Méndez en jugada por el centro, volvió a complicarse la vida por sus propios errores.
Y Atlante, cuando el conjunto de casa se quedó con diez hombres por la expulsión de Jorge Campos, se llenó de ambición y buscó aumentar la cosecha que había logrado Víctor Pacheco, pero la entrada de Palmeros al centro, apoyado por Denis Caniza ayudó a anular al rival.
Guerreros ganó 2-1 y sigue jugando bien. Entre sus fallas está cederle mucho el balón al rival, pero han seguido creciendo jóvenes como Elgabry, Juan Carlos Arellano, René Carrillo, que entró de cambio, y el mismo Gabriel Palmeros.
Atlante peleó, ganó muchos balones, pero no tuvo acierto en sus incursiones tanto por el buen trabajo de la media, donde volvió a destacar Carlos Cariño y muy especialmente Édison Méndez, con su futbol sereno y efectivo que creció esta vez con su gol.
Otra muy buena noticia fue que Santos Juvenil volvió a tener otra resonante victoria de 5-2 ante Atlante, volviendo César Urueta, de 18 años de edad, a ser la gran figura con cuatro goles para llegar, en lo que va del torneo, a 22 tantos. El quinto gol lo anotó Armando Portillo.
En el estadio saludamos a Jared Borgetti acompañado de su esposa Mónica. Nos dijo el goleador que tienen que seguir luchando para dejar la mala racha, y que él confía en recobrar su capacidad goleadora. Dijo también, que no estará en el próximo partido de la Selección por lesiones.