El gran ausente del pasado Mundial de Futbol, Héctor “El Pity” Altamirano sigue haciendo lo suyo y muy bien. De la zona defensiva hace tiempo ha incursionado con éxito en la ofensiva y sus jugadas las acompaña de goles, cada ves con mayor generosidad.
Recordamos que en una temporada parecía haber un duelo de goleo entre él y Jared Borgetti. Anotaba el de Sinaloa y lo hacía también el de Oaxaca. Y es que en Santa Rita, práctica a práctica “El Pity” le dedica tiempo especial a sus tiros colocados y de larga distancia.
Es muy común verlo ahí mandando sus disparos por sobre la valla metálica que se coloca entre el tirador y el marco. Pone sus cinco sentidos en todo lo que hace y cuando está en la cancha se le notan sus deseos de pulir detalles que le ayudarán en los partidos.
Pero fuera de la cancha es el más bromista, el más alegre, el que mastica con gusto y placer su chicle, mismo que también lo acompaña en los partidos. Su condición física es de las mejores lo que le permite moverse a placer por toda la cancha.
Hizo muchos méritos para estar en el pasado Mundial, pero Javier Aguirre lo ignoró. El no perdió las esperanzas. Siguió trabajando y aportando cosas mejores al Santos Laguna, donde es figura importante y donde ha alcanzado fama y popularidad.
Alguna vez, de joven, estuvo en el futbol italiano y regresó al Cruz Azul de donde emigró a la Comarca Lagunera. Hoy, oportunidad que le da La Vople misma que aprovecha al máximo, pidiendo ya un puesto en la alineación titular, que bien lo merece.