La modelo brasileña Vanessa Fonseca, una joven y escultural mulata que saltó de un barrio pobre carioca a las pasarelas internacionales, fue una de las figuras destacadas del Fashion Río, que comenzó el viernes en Río de Janeiro.
La cenicienta Vanessa vistió las confecciones de conocidos modistas brasileños, en varios de los 22 desfiles que se realizaron durante el fin de semana.
Los desfiles comenzaron en una pasarela improvisada en el Museo de Arte Moderno y muestran el trabajo de 26 modistas brasileños.
El Fashion Río, que este año llegó a su cuarta edición, exhibió las colecciones diseñadas para las estaciones de otoño e invierno, por las principales casas de confecciones de Río de Janeiro, Belo Horizonte y otras ciudades brasileñas.
Los organizadores invirtieron cuatro millones de reales (unos 1.4 millones de dólares) y esperan recuperar su protagonismo en el mundo de la moda de Brasil, que han perdido en los últimos años ante el éxito de los desfiles organizados por sus rivales de la ciudad de Sao Paulo.
