EFE
TOKIO, JAPÓN.- El responsable del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), Mohamed ElBaradei, urgió ayer a Irán a abandonar “todas las actividades relacionadas con el enriquecimiento de uranio”, elemento base de la producción de armas nucleares.
ElBaradei está desde el martes en Tokio, donde ayer subrayó la necesidad de alcanzar “un acuerdo diplomático” con Teherán para despejar las sospechas que recaen sobre este país y sus supuestas ambiciones en el terreno de la energía nuclear de uso militar.
“Les estoy instando (a los iraníes) obviamente a suspender todas las actividades relacionadas con el enriquecimiento (de uranio) como una medida que permita crear confianza”, aseguró el director general del (OIEA) en declaraciones a la prensa nipona.
Aunque ElBaradei dijo que no creía que Irán hubiera ya procesado uranio enriquecido, sin embargo, manifestó su preocupación por el hecho de que ese país “esté convirtiendo parte del uranio que tiene en hexafluoruro” de uranio.
Este comentario aludió al reciente reconocimiento por parte de Irán de que dispone de varias toneladas de hexafluoruro de uranio, gas que permite enriquecer ese elemento hasta niveles necesarios como para incorporarlo como material fisible en una bomba atómica.
Aunque ElBaradei indicó que es temprano para presentar este preocupante asunto ante el Consejo de seguridad de la ONU, explicó que el OIEA seguirá muy de cerca el desarrollo de la situación antes de la próxima reunión de la Junta de Gobernadores de este organismo, prevista para noviembre próximo.
La exigencia de ElBaradei para que Irán no toque las turbulentas aguas de la investigación nuclear que ronda el terreno militar es la respuesta a las declaraciones del director de Seguridad Nacional iraní, Hassan Rowhani.
El responsable iraní reiteró que su país no cederá ante la presión internacional y no suspenderá ese polémico programa destinado a enriquecer un uranio que, según Irán, es para la producción de energía pacífica.
El pasado 18 de septiembre, el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) pidió a Irán la suspensión “inmediata” del citado programa.
“No aceptaremos más presiones. Para resolver este problema sólo hay dos posibilidades: o encontrar una solución política o decantarnos por la confrontación. Estamos preparados para ambas”, dijo Rowhani.