PUNTO DE VISTA | HAY QUE DEJAR DE PRIVILEGIAR LO ANECDÓTICO
EL SIGLO DE TORREÓN
Insta Álvaro Delgado a formar reporteros que profundicen en los asuntos de verdadero interés público
TORREÓN, COAH.- Para el periodista, Álvaro Delgado, el periodismo en México tiene una necesidad urgente: La de especializar a sus reporteros de manera que éstos dejen de privilegiar las anécdotas y las trasciendan, para profundizar en los asuntos que realmente son de interés público.
“Toda la información es relevante pero no hay que dejarla en la superficie, se puede enriquecer profundizando, es decir, contextualizándola, algo que por desgracia se pierde de vista y sólo queda en un hecho aislado”.
El ganador del Premio Nacional de Periodismo 2003 en la categoría de reportaje-periodismo de investigación, impartió la conferencia “Periodismo electrónico: entre la ética y el negocio”, dentro de las Décimas Jornadas de Comunicación que esta semana llevó a cabo la carrera de Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Autónoma de Coahuila.
Con un escenario montado a propósito del tema en el Teatro de Cámara de la institución, con una televisión como mesa de exposición, el periodista del semanario Proceso, sólo hizo una breve referencia a la televisión mexicana, la que en su opinión, se dedica a transmitir noticias irrelevantes que las recibe todo el país “de ahí que el Gobernador de Coahuila recurre de vez en cuando al Canal de las Estrellas, sobre todo porque quiere ser el candidato a la Presidencia”.
Álvaro Delgado rehusó ahondar en este aspecto y concentró la plática en el periodismo escrito, su especialidad, el que vive una evolución positiva a lo largo de todo el país, con periodistas plenamente comprometidos con la responsabilidad social de informar asuntos de interés público.
Manifestó que trata de no ser tan pesimista cuando se dice que el periodismo mexicano es malo, porque generalmente se le compara con el que se practica en Estados Unidos, pero en el caso de los periódicos, los del vecino país ni siquiera pueden ser tomados como escuela para mejorar lo que se hace en nuestro país.
Ante una concurrencia nutrida que luego comenzó a reducirse, Álvaro Delgado consideró que en términos generales, la profesión no puede ser vista como una chamba, un medio para vivir y medianamente cumplir con la responsabilidad, sino un trabajo de profesionalismo y conquista permanente en busca de la mejor noticia, incluso de aquélla que otros medios no conozcan su existencia.
Los alumnos de la carrera de Ciencias de la Comunicación, más interesados por la televisión y la cinematografía, comenzaron a mostrar desinterés: algunos abandonaron las butacas y otros optaron por recostarse en ellas, mostrando un cansancio que el conferencista no pudo eludir.
“No le hace que no les importe el periodismo escrito... no le hace que no les importe porque ustedes se van a dedican a leer noticias, hacer comerciales, operar páginas web o hacer producciones o películas.
Lo que yo digo es que aprendan a leer periódicos y a ver televisión, a saber distinguir entre los géneros periodísticos para que no cometan las tonterías que suelen cometer muchos dizque comunicadores o periodistas en sus trabajos, que no saben distinguir entre un artículo y un reportaje, un editorial o una columna y por lo que se ha extendido tanto el aborrecible y chocante analismo político”, dijo Álvaro Delgado a su auditorio.
A su juicio, ello es lo que ha provocado también que los periodistas serios sean vistos desde el punto de vista de una fama arraigada “de que los periodistas son borrachos, corruptos, prepotentes e ignorantes y de que por eso es mejor recurrir a los analistas políticos, políticamente correctos”.
En el transcurso de un mes, Álvaro Delgado publicará el libro “El Ejército de Dios”, una segunda parte del libro “El Yunque”, reportaje de investigación que le valió el Premio Nacional de Periodismo en el género respectivo y que a su consideración, debe ser tomado en cuenta por quienes toman las decisiones en el país.
De hecho, dijo, ya se han creado comisiones caza-yunques en el interior de la Cámara de Diputados, a fin de dar seguimiento a la información que se hizo pública respecto de la existencia de la organización nacional El Yunque, la cual está vigente y con presencia en todos los ámbitos de la vida del país.
