Ante el surgimiento de nuevos delitos se requieren cambios legales, señala el procurador.
NOTIMEX
MÉXICO, DF.- El actual sistema de justicia en México ha sido rebasado por la realidad social y convertido en uno lento y poco transparente que desalienta la denuncia y propicia la impunidad, afirmó el procurador general de la República, Rafael Macedo de la Concha.
Al participar en la Reunión Nacional de Análisis y Propuestas para las ?Reformas al Sistema de Justicia Penal Mexicano?, Macedo de la Concha señaló que de ahí la necesidad de impulsar una Reforma estructural del sistema de justicia.
Ante legisladores y procuradores de justicia de diversas partes del país, comentó que hay un reclamo social por tener un sistema de justicia con mejores herramientas para castigar y combatir el delito, y hacerlo más confiable y expedito.
Resaltó que la delincuencia ha evolucionado, por lo que hay el surgimiento de nuevos delitos y formas de operación por parte de quienes infringen la Ley y esto hace ver la necesidad de contar con un sistema de justicia que esté mejor preparado, técnica y metodológicamente, para detectarlos y combatirlos.
Por ello, subrayó, ?necesitamos un sistema con procedimientos más ágiles, eficaces y sencillos y de ahí que se requieren cambios legales que garanticen que estos nuevos delitos estén contemplados en el marco jurídico para que no haya espacios de impunidad?.
Debatir en torno a los retos actuales de la justicia es un ejercicio que requiere estudiar ?el contexto nacional con respeto a nuestras tradiciones jurídicas, pero también qué ocurre en otras latitudes para analizar tendencias en naciones similares a la nuestra?, indicó.
Comentó que recientemente estudió la Reforma al sistema de justicia en Europa, y uno de los aspectos fundamentales es que llevan la convicción de unidad de esfuerzo y trabajo y buscan hacer congruente su legislación con los compromisos adquiridos en el contexto global, lo que México debe tomar en cuenta.
México, dijo, tiene una Constitución que es la parte vertebral de la vigencia del Estado de Derecho y que deberá sufrir las menores modificaciones para poder avanzar, ya que se trata de la Ley Suprema de la Nación.
Más adelante, expresó que el desafío de la justicia penal es construir un sistema acorde a la realidad que combata la impunidad, aliente la denuncia, sea transparente, castigue el delito y haga de la víctima y de la reparación del daño el centro de la justicia.
Consideró que una alternativa para eficientar al sistema penal y devolverle su fin último es el principio de oportunidad, que consiste en el pronto restablecimiento del orden público y la incorporación social del sentenciado.
Macedo de la Concha refirió que un sistema moderno supone la adopción de mecanismos de justicia alternativos, siempre y cuando los delitos de los que se trate no involucren violencia, ya que podrían ser una oportunidad para desahogar la carga de los tribunales, agilizar los juicios y sobre todo reparar el daño causado a la víctima del delito.
El titular de la PGR expuso que la Reforma enviada por el Ejecutivo federal en la materia se encuentra abierta al debate para ser perfeccionada, pero sentenció que ?no se vale criticar sin proponer y argumentar sin sustentar las razones ni ofrecer soluciones?.
A su vez, el secretario de la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados, Francisco Javier Valdez, dijo que esta reunión es un momento fundamental para establecer si las instituciones de la República responden a la demanda ciudadana y a la realidad del país.
Indicó que lo que interesa a la sociedad son los resultados que pudieran tenerse con relación a las grandes reformas que se llevarán a cabo.
El legislador consideró que el actual sistema de seguridad pública bajo el modelo que viene funcionando no es la solución al combate a la criminalidad, porque se encuentra agotado y requiere una profunda reforma.
Añadió que de ahí que un nuevo sistema tendrá que replantear los modelos de estructuración y capacitación de las policías, en donde se establezca que el federalismo no es signo de una autonomía estatal y municipal mal entendida ni de descoordinación, sino de eficacia.
Por ello se requiere considerar un nuevo modelo en materia de fiscalía, y hacer una profunda reestructuración de las figuras del Ministerio Público, concluyó.
