Aumenta cada día el número de vendedores ambulantes en el lugar.
EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Las acciones que realiza el Departamento de Plazas y Mercados de la actual administración municipal para reordenar a los vendedores ambulantes deberían proyectarse también hacia el tianguis “El Parralito” donde cada día aumentan los puestos con toda clase de vendimia.
Uno de los problemas que hasta el momento no ha encontrado solución es el poco espacio que deja para el peatón y los automovilistas la presencia de los establecimientos rodantes colocados sobre la avenida Morelos y calle 20 de Noviembre.
Algunos comerciantes establecidos entrevistados por El Siglo de Torreón que solicitaron el anonimato, dijeron que desean conocer si existe un padrón con el número de vendedores que operan en el tianguis “El Parralito”, ya que cada vez son más los puestos que se instalan en este lugar.
Informaron que el ex titular del Departamento de Plazas y Mercados del Municipio, Amador Robles Ramírez, les había prometido reordenar la ocupación de espacios en la vía pública, “pero se acabó la administración de Leticia Herrera y no vimos ninguna acción al respecto”.
Recuerdan que Robles Ramírez trabajaba en la elaboración del padrón de vendedores de este mercado, el cual se instala durante los viernes, sábados y domingos en la avenida Morelos, entre las calles 20 de Noviembre y González Ortega en la zona centro de la ciudad.
El problema en este caso radica en que, según los vendedores establecidos, el número de negocios ambulantes se ha elevado en forma indiscriminada. Esto es porque los comerciantes que se instalan los jueves en el tianguis ambulante de la colonia El Dorado, sobre el bulevar Justino Sánchez Madariaga, lo hacen también los fines de semana en el de “El Parralito”.
“Una vez los sancionaron, pero no han entendido y aún vienen hasta acá para colocar su vendimia, lo cual creemos que es una competencia desleal porque nosotros no hacemos lo mismo con ellos”, manifiesta uno de los entrevistados.
Aunque los comerciantes ambulantes no tienen permiso para expender discos de los llamados “piratas”, la práctica continúa, “pero clandestinamente”. Ellos desean que el Municipio no siga permitiendo la presencia de estos vendedores porque manejan mercancía sancionada por la Ley.
Una alternativa
Para un sector de la población, el tianguis Dos “El Parralito”, es su salvación. Muchas familias de escasos recursos económicos acuden para comprar prendas de vestir y artículos diversos.
Como es el caso de Socorro López, quien tiene cuatro hijos. “Yo no trabajo, pues no hay quién me cuide a mis niños y mi esposo saca 600 pesos en la maquiladora donde trabaja y esa cantidad hay que estirarla para comprar, aparte de ropa para vestir, calzado, luz, agua y renta, la leche y pañales para los dos pequeños y útiles escolares para la niña que ya está en primero de primaria”.
Ella explica que acudió para comprar ropa para su marido, “también estoy buscando la de invierno, que ya está en puerta” y luego confiesa que antes le daba “cosa” acudir a este lugar, pero que su necesidad fue más grande que todo remilgo.
En los puestos, la gente encuentra desde pantalones, camisas y vestidos. También existen puestos donde ofrecen artículos para el hogar, como lámparas, sartenes, juegos de cucharas, relojes de pared y despertadores; aparatos deportivos, herramientas, bolsas de mano y una gran variedad de adornos que traen de El Paso, Texas.