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Mérida, YUCATÁN.- El presidente de la mesa directiva del Senado de la República, Enrique Jackson Ramírez pidió pugnar por el fortalecimiento de las instituciones y la justicia, como acciones indispensables para evitar abusos de poder y combatir la impunidad.
En su discurso al clausurar el foro “El poder judicial y la consolidación del Estado de Derecho”, destacó que fortalecer estos dos entes generaría mayor equidad, igualdad, estabilidad y seguridad para los mexicanos.
En relación con el estado de derecho, opinó que la vigencia del mismo, en un marco de certidumbre “destierra moldes autoritarios y evita abusos de poder, y son la mejor manera de combatir la impunidad”.
No hay nada que lastime más a la sociedad que una justicia selectiva que discrimina a los más débiles, que incrementa la desigualdad, que socava la credibilidad y la confianza en las instituciones, agregó.
Por ello, abundó el también legislador priista, nosotros los senadores estamos en favor de justamente fortalecer las instituciones, de fortalecer la justicia.
Subrayó que para los senadores “es nuestra convicción hacer mejores leyes, leyes que se cumplan; los senadores estamos por que se consolide la independencia y autonomía del poder judicial, porque en los hechos sea vigente la separación y equilibrio de los poderes”.
Insistió en la consolidación de esa separación y equilibrio de poderes “para que prevalezca entre ellos la corresponsabilidad y se evite a toda costa, con el apoyo de la ley, todo intento de imposición o predominio de unos sobre otros”.
En tanto, sugirió que el equilibrio de poderes debe proyectarse como un ente “funcional y eficaz, en un terreno fértil y propicio para el pleno ejercicio del derecho, de los ciudadanos, que sea eficaz para la protección de la sociedad, de todas las personas”.
Por ello, dijo, en el Congreso, en el Senado, tenemos claro nuestro renovado papel, sabemos nuestro compromiso para que prevalezcan los acuerdos que permitan la gobernabilidad, la estabilidad, dar rumbo y destino a al país.
“Los senadores tenemos claro que apuntalar nuestra democracia es una forma de rechazar argumentos populistas que tratan de evadir la autoridad del poder judicial”, agregó Jackson Ramírez.
“En nuestra democracia ya no tiene cabida la demagogia, ni los desplantes autoritarios, ni las hegemonía, ni las competencias de otros, ni el populismo que trata de enfrentar la fuerza social o la política a la fuerza y razón del derecho”, apuntó.