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MÉXICO, DF.- La Cámara de Diputados validó ayer como documento oficial para trámites en México la matricula consular que expide la Cancillería a los mexicanos que radican en otros países, en especial a los emigrantes que viven en Estados Unidos.
El pleno de la Cámara aprobó por unanimidad modificar la Ley de Nacionalidad para “terminar con la incongruencia de que la matrícula consular se acepte en Estados Unidos, pero no en México”, según cita el dictamen.
Desde 2003, México ha reforzado su programa de matrículas consulares, especialmente para apoyar a los mexicanos indocumentados que viven en Estados Unidos y que por carecer de papeles oficiales, se ven impedidos a realizar algunos trámites, entre ellos la obtención de licencias de conducir y la apertura de cuentas bancarias.
En Estados Unidos viven más de 24 millones de personas de origen mexicano, de las cuales unos 15 millones son nacidas en México y, de estas últimas, cerca de cinco millones están indocumentadas.
La matrícula consular es un documento de identidad expedido por las representaciones mexicanas en Estados Unidos a sus ciudadanos, independientemente de su situación migratoria, que puede ser considerado válido para diversos trámites, pero cuya legalidad es aún muy debatida en Estados Unidos.
Según el proponente de la iniciativa, el diputado Omar Bazán, del opositor Partido Revolucionario Institucional, además de las ventajas que conlleva el que la matrícula ya será aceptada en México, la reforma amplía la posibilidad de su reconocimiento en el extranjero.
Bazán recordó que los Gobiernos de todas las naciones han tenido que recurrir a los pasaportes y las visas para distinguir a los nacionales de los extranjeros, en su intento por controlar el flujo migratorio de personas.
México no ha sido la excepción, señaló el legislador, y por ello ha emitido matrículas consulares desde hace más de un siglo, aunque es a partir de marzo de 2003 cuando incluye algunos elementos de seguridad para evitar su falsificación.
Entre las nuevas características de la matrícula se encuentran las fotografías digitalizadas, bandas magnéticas e identificaciones holográficas, que no permiten su alteración.
