EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Las viejas rencillas entre bandas contrarias fueron las causas por las que la madrugada del domingo se suscitara una riña en la colonia Lázaro Cárdenas donde resultaron dos personas lesionadas con arma blanca que fueron atendidos en la clínica 16 del Seguro Social.
De acuerdo a los datos recabados por Yolanda Ezqueda Moreno, agente en turno del Ministerio Público de Delitos Contra la Vida y la Salud Personal, los hechos se registraron alrededor de las dos de la mañana, cuando Manuel Chávez Robledo y José Bernardo Rodríguez Chávez, regresaban a la casa de este último luego que fueron a un domicilio donde compraron varias cervezas para seguir la parranda iniciada desde la noche anterior.
Poco antes de llegar a su destino, fueron interceptados por un sujeto al que conocen por el apodo de “El Amigo”, con quien anteriormente han tenido diversos problemas, por lo que se hicieron de palabras y en determinado momento se inició el pleito.
Pero esta vez Manuel y José Bernardo no se esperaban la reacción de su acérrimo rival, quien sacó de entre sus ropas una navaja con la que los hirió en diversas partes del cuerpo y una vez hecho lo anterior, huyó del lugar con rumbo desconocido.
Una ambulancia de la Cruz Roja acudió al sitio donde se registró la riña para trasladar a los heridos a la clínica 16 del Seguro Social, donde los médicos le apreciaron a Manuel, de 18 años, domiciliado en avenida Novena No. 463 de la colonia Vicente Guerrero, una herida producida por instrumento punzo cortante en el antebrazo izquierdo.
Por su parte, José Bernardo, de 20 años, presentó una herida cortante en la mano derecha, por lo que ambos quedaron en observación por varias horas en el mencionado hospital de donde luego los dieron de alta y regresaron a sus respectivos domicilios.
Baleado por “Los Dickies”
Con una bala que le quedó alojada en el pecho del lado izquierdo, ingresó de emergencia al Sanatorio Español, Juan Antonio Díaz Velázquez, luego que fuera baleado por miembros de la banda “Los Dickies” de la colonia Francisco Villa.
De 23 años de edad, con casa en calle Texcoco No. 434 de la colonia en mención, Juan Antonio regresaba a bordo de su bicicleta luego de haber asistido a un baile al que lo invitaron.
Según lo manifestado por Imelda Velásquez Fuentes, de 46 años, madre del lesionado, dijo que eran como las 4:30 horas cuando su hijo fue interceptado por varios sujetos por la avenida De la Paz, a quienes identificó como de la pandilla de “Los Dickies”.
Refiere que uno de los individuos sacó una pistola y sin motivo alguno le disparó, hiriéndolo en el tórax, lado izquierdo sin orificio de salida, por lo que su estado de salud es delicado.
Baile termina en campal
Un baile celebrado en la colonia Cerro de la Cruz, terminó en riña campal durante la cual se registró una balacera donde resultó lesionada una persona, luego que se encontraron dos pandillas rivales que quisieron dirimir sus diferencias sin importarles la presencia de gente inocente.
Los hechos se registraron aproximadamente a las 01:15 horas cuando se realizaba un festejo en un domicilio del mencionado sector habitacional a donde acudieron decenas de personas.
En determinado momento dos bandas rivales se encontraron frente a frente y se originó la riña en la cual llovieron objetos diversos para uno y otro lado, por lo que se suspendió el bailongo mientras se trenzaban a golpes integrantes de los grupos antagónicos.
De pronto, se escucharon detonaciones de arma de fuego y uno de los asistentes a la fiesta, Luis Gerardo Ibarra González, de 26 años de edad, domiciliado en calle Francisco I. Madero No. 260 de la colonia Cerro de la Cruz, resultó herido de bala.
La unidad 282 de la Cruz Roja acudió hasta el lugar de la trifulca donde levantó al lesionado en la esquina de calle Andrés Terán y avenida Matamoros de la misma colonia, para trasladarlo al puesto de socorros donde se le brindó atención médica.
Luis Gerardo presentó una herida producida por proyectil de arma de fuego en el glúteo derecho con salida en el glúteo izquierdo, por lo que quedó encamado para su observación, reportando los médicos que su estado de salud es estable.
