AP
CARACAS, VENEZUELA.- El vicepresidente venezolano José Vicente Rangel dijo ayer que Venezuela no romperá relaciones con Panamá, un día después de que Venezuela ordenó retirarse a su embajador de ese país.
“No vamos a romper (relaciones). Hemos retirado al embajador y el presidente (Chávez) no va a concurrir a la toma de posesión (del presidente electo Martín Torrijos)”, dijo el vicepresidente a la prensa.
Venezuela anunció el viernes que retiraba a su embajador en Panamá, Flavio Granados, como protesta por el indulto que concedió la presidenta panameña Mireya Moscoso a cuatro anticastristas.
Moscoso dijo que la medida se dictó para prevenir que los militantes anticastristas fuesen extraditados a Venezuela o a Cuba en donde los habrían “asesinado”.
Granados dijo el viernes que el temor sobre la muerte de los anticastristas en Venezuela era injustificado, porque no existe la pena de muerte en el país.
Rangel criticó la decisión de la Presidenta, calificándola de “lamentable”.
“Se acaba de dictar una medida de gracia por parte de un jefe de Estado para varios terroristas internacionales. Eso debilita la lucha contra el terrorismo”, dijo Rangel.
El retiro del embajador venezolano de Panamá se sumó a la decisión de Cuba de cortar lazos diplomáticos con ese país el jueves por el indulto a Luis Posada Carriles, Gaspar Jiménez, Guillermo Novo y Pedro Remón, a quienes Cuba acusa de durante una Cumbre Iberoamericana que se realizó en Panamá en 2000.
Las cortes panameñas decidieron que no había pruebas suficientes para acusarlos de intento de asesinato y los condenó a entre siete y ocho años de prisión por posesión de explosivos y falsificación de documentos.
No se conoce el paradero de Posada Carriles, pero Jiménez, Novo y Remón llegaron a Miami.
“Creo que el Gobierno de Estados Unidos tiene una inmensa responsabilidad en lo que ha ocurrido. Al darle inmediatamente asilo y recibir como héroes a los terroristas cubanos en Miami está participando en una política de complacencia con el terrorismo”, dijo Rangel. Estados Unidos es el mayor comprador de crudo de Venezuela, pero bajo el Gobierno de Chávez las relaciones han sido tensas debido a la amistad del Mandatario con Fidel Castro y sus críticas a las políticas de libre mercado de Washington.
En 2001, Venezuela solicitó sin éxito la extradición de Posada Carriles, quien se fugó de una cárcel venezolana a mediados de los 80 en medio de un proceso judicial que se le seguía acusado de haber participado en la explosión de un avión cubano en 1976 y en el que murieron 73 personas.
