Cuzco, (EFE).- El espíritu de aventura, primer mandamiento en las guías de viajes por Latinoamérica, no hace falta alguna para abordar el lujoso tren "Hiram Bingham", que une Cuzco con la ciudadela inca de Machu Picchu.
No hay registro que mida el placer que causa observar la belleza de este tesoro arqueológico, destino obligado para los turistas que visitan Perú, mientras se viaja a "cuerpo de rey" en un medio de transporte tan lujoso.
Este especial servicio ferroviario que explota la empresa Perú Rail se llama "Hiram Bingham" en homenaje a uno de los descubridores de la ciudadela inca y se inicia, a diferencia de los otras rutas ferroviarias, en la Estación Poroy, a 3.550 metros sobre el nivel del mar.
El camino se inicia en Poroy para evitar los cinco "zig zag" que permiten al tren subir la pendiente del Cuzco, antes de que comience su descenso al Valle Sagrado del río Urubamba rumbo a Machu Picchu.
Los vagones del "Hiram Bigham" fueron construidos en Africa del Sur y se parecen a los del famoso Orient Express, que desde 1833 hasta 1977 unió París con Estambul.
El "Hiram Bigham" cuenta con un cocinero peruano especializado en los platos de la nueva cocina andina y una pareja de guitarristas que le pueden cantar desde un huayno (baile típico andino) hasta una canción mexicana de mariachis.
En el camino de 130 kilómetros que separa Machu Picchu de Cuzco, el viajero puede observar cómo el ralo paisaje de las altas montañas empieza a dejarle paso a la exhuberante geografía de la selva donde nace el río más caudaloso del mundo: el Amazonas.
Tras experimentar los sabores de la cocina Novoandina peruana, donde la Alpaca (camélido sudamericano) es el ama y señora junto al cóctel Pisco Sour, mezcla precisa de Pisco, huevo y limón; el viajero llegara a Machu Picchu, "la ciudad perdida de los Incas".
Si al arribar al centro arqueológico más importante de Perú, el Inti -Sol en lengua quechua y máximo dios de los Incas- no lo acompaña y sí la lluvia, no desespere, porque los Apus (espíritus de las montañas) no permitirán que deje Machu Picchu sin que se sienta bendecido por los dioses de la naturaleza de los antiguos peruanos.
En el momento más inesperado del recorrido, según EFE pudo comprobar, tras la lluvia apareció un K'uychi (Arco Iris en quechua) que causó regocijo entre los turistas que paseaban por Machu Picchu y que se rendían ante la belleza que regalaba la naturaleza.
Según aseguró a EFE la gerente de Perú Rail, Yasmine Martin, "si el viajero quiere llegar a Machu Picchu fenomenalmente bien y con comodidad en dosis elevadas, debe viajar en esta ruta".
Los famosos que han viajado en el tren desde que el servicio se inauguró en septiembre pasado han sido, entre otros, las cantantes Gloria Estefan y Shakira, el actor Leonardo Di Caprio y su novia Gisele Bündchen y la animadora de la televisión argentina Susana Giménez.
También han vivido esta experiencia el diseñador norteamericano Calvin Klein, la princesa inglesa Michael de Kent y el presidente peruano, Alejandro Toledo y su esposa, Eliane Karp que estuvieron filmando un documental sobre los atractivos turísticos del país para el canal Discovery Channel.
El fin del paseo a Machu Picchu se realizará al caer el sol, ya que los pasajeros del "Hiram Bingham" son los últimos en abandonar la ciudad inca, lo que les convierte en los privilegiados que la disfrutan en soledad y sin que los miles de turistas que la visitan a diario se les crucen en el camino.
De regreso a Cuzco, los pasajeros del "Hiram Bingham" fueron testigos de un anuncio sentimental; el contador inglés Derek Lloyd le pidió matrimonio a su novia, Sarah, con la que llevaba seis años de relación, tras observar el Arco Iris que apareció inmediatamente después de la lluvia.
Según dijo a EFE el emocionado Derek, en medio de un festejo amenizado con música peruana y regado con champaña, el primer niño de su matrimonio con Sarah se llamará Rainbow (Arco Iris en inglés).
Perú Rail, perteneciente a Orient-Express Hotels Ltd, es un consorcio divisible que adquirió la concesión de la red de ferrocarriles del Sur y Sud-Este de Perú por 30 años inicialmente.
Esta red comprende las rutas Cuzco-Machu Picchu, Cuzco-Lago Titicaca (Puno), Lago Titicaca (Puno)-Arequipa y Arequipa a los puertos de Mollendo y Mataraní.
