El tercera base de Colorado obtiene el título de carreras producidas en la Liga Nacional.
TORREÓN, COAH.- El cuadrangular 35 de Vinicio Castilla, el sábado anterior en Houston, sirvió para que el oaxaqueño llegara a 131 carreras producidas en la temporada, más que suficientes para ganar el título de ese departamento en la Liga Nacional.
El regreso de Marco Vinicio Castilla Soria a los Rockies de Colorado en 2004 fue muy provechoso para el tercera base mexicano, que con esa misma franela había tenido su mejor actuación a la ofensiva en 1998, cuando impulsó 144 carreras y conectó 46 jonrones, antes de pasar a las Mantarrayas de Tampa Bay, Astros de Houston y Bravos de Atlanta, en donde había iniciado su carrera en el mejor beisbol del mundo.
Los viejos aficionados aún recuerdan con orgullo aquel 1954, justo hace 50 años, cuando ?Beto? Ávila se convirtió en el primer latino en ganar un campeonato individual en ligas mayores; en aquel entonces el segunda base veracruzano de los Indios de Cleveland, terminó con .341 de promedio ofensivo, con los monarcas de la Liga Americana y barridos en la Serie Mundial por los Gigantes de Nueva York.
Fue en el primer juego de aquel Clásico de Otoño, cuando Willie Mays, de los Gigantes, realizó la mejor atrapada en la historia de la Serie Mundial, de espaldas al pentágono y sobre un batazo de Vic Wertz, en la octava entrada, con corredores en primera y segunda sin out; Wertz bateaba de 3-3 y en ese momento la pizarra estaba empatada a tres carreras por equipo. El relevista, Don Liddle, se había salvado y Nueva York, dirigido por Leo Durocher, vendría en la décima entrada para ganar el partido a los Indios de ?Beto? Ávila, cuyo manager era Al López.
Tuvo que pasar medio siglo para que otro pelotero mexicano hiciera historia en el mejor beisbol del mundo y el honor corresponde a Vinicio Castilla, nacido en Oaxaca el cuatro de julio de 1967; con 131 carreras producidas gana el título de ese departamento en el Viejo Circuito, con mejor marca que verdaderos estrellas del mejor beisbol del mundo, como Scott Rolen, Jim Edmonds, Adrián Beltré y Jim Thome; a todos los mencionados se les consideraba grandes favoritos para el título de impulsadas, sin contar con la actuación de Vinicio Castilla.
Surgido de los torneos nacionales que organizaba el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Vinicio Castilla fue firmado por Jack Pierce para los Saraperos de Saltillo en la Liga Mexicana; el oaxaqueño estuvo a punto de ser dado de baja por órdenes de Armando Guadiana Tijerina, entonces presidente de la organización sarapera, sin embargo, finalmente hubo paciencia y el entonces parador en corto fue prestado a los Acereros de Monclova, para regresar a la capital de Coahuila y dar el brinco a las ligas mayores, con los Bravos de Atlanta.
El beisbol nacional obtuvo un triunfo más, como en 1954 fue el de ?Beto? Ávila; Vinicio Castilla, a sus 37 años de edad, es el encargado de hacer historia y no hay duda ya de que el mejor bateador mexicano en ligas mayores, tiene asegurado un lugar en el Salón de la Fama del Beisbol Profesional Mexicano, sólo deberán pasar cinco años de su retiro, para que el recinto abra las puertas a este ilustre pelotero oaxaqueño.
El oaxaqueño Vinicio Castilla, tercera base de los Rockies de Colorado, se convirtió en el primer mexicano en conseguir el campeonato de carreras producidas en la Liga Nacional.
Castilla llegó a 131 carreras impulsadas en la temporada regular y dejó a su más próximo rival, Scott Rolen, de los Cardenales de San Luis, con 124.
Con este logro, Castilla cerró un extraordinario año en 2004, donde superó la barrera de los 300 cuadrangulares en su carrera y las mil carreras impulsadas, para ser el primer bateador nacional en conseguirlo.
Este mismo año también superó a Jorge "Charolito" Orta, como el mexicano con más hits en grandes ligas. Orta dejó su marca en 1,619 y Castilla suma ya 1,696.