México, (EFE).- Alrededor de 2.300 ballenas, 972 de las cuales eran ballenatos, han visitado desde enero de este año hasta la fecha las costas de Baja California Sur, lo que constituye una "cifra histórica", informaron fuentes oficiales.
Cada año estos mamíferos marinos emigran hasta 12.000 kilómetros desde las zonas del océano Artico para aparearse o dar a luz en las bahías mexicanas, siendo las costas de Baja California Sur, al noroeste y sobre el Pacífico, su principal centro de apareamiento.
En las lagunas de San Ignacio y Ojo de Liebre, dos de las más famosas, la afluencia de ballenas grises ha sido la mayor en muchos años, según informó anoche la Secretaría de Medio Ambiente (Semarnat).
"Estas lagunas son punto vital para la ballena gris que, año con año, busca la calidez de las aguas mexicanas para aparearse y para criar a sus ballenatos", indicó la dependencia.
En la presente temporada de avistamiento de ballenas, que se prolongará hasta principios de abril, unas 12.000 personas han visitado los puntos donde los cetáceos suelen concentrarse.
Las visitas están organizadas por cooperativas de pescadores, que mediante reglas estrictas han conseguido que los turistas no se conviertan en una molestia para los animales.
Los tripulantes de lanchas recomiendan que no más de dos embarcaciones se acerquen a las ballenas, las cuales esporádicamente permiten a los turistas y curiosos tocarlas.
A partir de abril los cetáceos abandonan el Pacífico mexicano y regresan al océano Glacial Artico, al oeste del mar de Bering, al mar de Chukchi, y al mar de Beaufort, en torno a Alaska, siguiendo la línea del litoral estadounidense hacia el norte.
