Deja ofensiva una víctima mortal y daños materiales en los templos religiosos.
AGENCIAS
BAGDAD, IRAK.- Unas cinco iglesias cristianas, un hospital y un hotel en Bagdad fueron ayer blanco de ataques insurgentes, que dejaron al menos un muerto, mientras en la norteña ciudad de Kirkuk fue asesinado un responsable kurdo.
Ayer por la madrugada y de manera casi simultánea, cinco templos cristianos en la capital iraquí fueron atacados con explosivos sin que se registraran víctimas, sólo daños materiales, indicó el Ministerio del Interior.
Los estallidos resonaron en el transcurso de una hora y media, a partir de las 4.00 (0100 GMT). La primera explosión ocurrió en la Iglesia de San José, área de Nafaq al Shurta, dijo un portavoz del ministerio, coronel Adnan Abdul Raman.
Las otras iglesias atacadas fueron el templo de San Jacobo y el de San Jorge, en el vecindario de Doura, así como la Iglesia de Roma en Karrada y la de Santo Tomás en el área de Mansur.
Abdul Raman dijo que hubo algunos daños en el exterior de las iglesias y que los vidrios de las ventanas quedaron rotos.
?Hasta ahora ningún grupo se ha atribuido los ataques contra los templos de la comunidad cristiana, que constituye una minoría (casi el tres por ciento) dentro de Irak?, señaló el citado ministerio.
La serie de explosiones, producida un día después del inicio del Ramadán -mes sagrado de ayuno musulmán-, coincidió también con un ataque con morteros contra un hospital capitalino, donde un médico pereció y unas seis personas resultaron heridas.
El Ministerio iraquí del Interior indicó que el ataque se produjo frente al hospital de enfermedades cardiovasculares Eben al Beitar, situado en el barrio bagdadí de Al Salehia, en el noroeste de la capital iraquí.
Poco antes, el hotel de lujo Mansour Meliá, en el centro de la capital iraquí fue blanco de un ataque con cohetes que cayeron en el estacionamiento del edificio y causaron daños a vehículos y a varias ventanas, sin que hasta ahora se tengan reportes de víctimas.
En ese hotel se encuentran las oficinas de la embajada de China y se alojan corresponsales extranjeros, según reportes de prensa conocidos en esta capital.
Por otra parte, un responsable kurdo de la Dirección Regional de Educación, Adbel Ghafur Rahim Abu Baker, fue asesinado a tiros por desconocidos cuando salía de su domicilio en la norteña ciudad de Kirkuk.
Baker era miembro de la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK) y su asesinato tuvo lugar dos meses después de que el director general de Educación de Kirkuk, el turcomano Ibrahim Ismail, también fue abatido.
Los funcionarios estadounidenses se han preparado para una oleada de violencia por parte de los insurgentes, prevista con el comienzo del mes santo musulmán del Ramadán, que inició el viernes.
En agosto, varios ataques coordinados se presentaron en cuatro iglesias de Bagdad y una de Mosul, dejando al menos siete muertos y decenas de heridos, en la primera ofensiva coordinada contra la minoría cristiana de Irak, desde el año pasado, cuando comenzó la invasión por parte de Estados Unidos.
La comunidad de 750 mil cristianos en Irak se ha mostrado cada vez más nerviosa por el fortalecimiento del fundamentalismo islámico, desde el derrocamiento de Saddam Hussein, el año pasado. Cientos de personas han huido a la vecina Jordania y a Siria.
Algunos jerarcas musulmanes han condenado la violencia, en busca de mitigar los temores de los cristianos.
A casi tres meses de las elecciones generales en el país musulmán, la violencia continúa a pesar de los esfuerzos del Gobierno del primer ministro interino, Iyad Allawi y las fuerzas estadounidenses por restaurar el orden.
Mata coche bomba a cuatro soldados de EU
Cuatro soldados de EU murieron y uno fue herido por la explosión de un coche bomba en el oeste iraquí en una jornada que resultó también marcada por una ola de atentados contra cinco iglesias cristianas, un hotel y un hospital en Bagdad.
Según informó el mando militar norteamericano en un comunicado, el vehículo cargado con explosivos estalló de madrugada al paso de un convoy militar en la localidad de Al Qaim, cercana a la frontera con Siria y donde la deflagración causó la destrucción de dos vehículos militares en que viajaban las víctimas.
Poco después del ataque, fuentes hospitalarias citadas por la televisión emiratí Al Arabiya informaron de que en la misma ciudad habían muerto cuatro iraquíes, y treinta fueron heridos, por la explosión de bombas de mortero de procedencia desconocida.
El mando castrense norteamericano informaba entretanto que un soldado estadounidense había perdido la vida a consecuencia de las heridas que sufrió por el estallido de un artefacto explosivo ayer contra su patrulla cerca Mosul.
Asimismo, tres personas murieron por la explosión de una bomba en una carretera de la localidad de Mansuriya al Yabal, próxima a Baquba, a unos 90 kilómetros al noreste de Bagdad, según testigos.
Por último, fuentes del ministerio iraquí de Educación dieron cuenta de que uno de sus responsables de Kirkuk, a unos 290 kilómetros al norte de Bagdad, fue asesinado por desconocidos.
La víctima, que no fue identificada por las fuentes, era miembro de la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK) de Irak y fue tiroteada cuando salía de su hogar para dirigirse al trabajo.
Dos soldados estadounidenses murieron y otros dos resultaron heridos tras el choque de dos helicópteros estadounidenses en el suroeste de Bagdad, informaron fuentes militares de Estados Unidos en esa ciudad.
El mando militar estadounidense en Bagdad dijo que aún no se conocen las causas de la colisión de los dos helicópteros que se produjo en la capital iraquí.
Con las nuevas bajas los soldados muertos en Irak desde el inicio de la invasión y posterior ocupación de Irak en marzo de 2003 suman al menos mil 076.
