París, (EFE).- La instituciones más corruptas del mundo son los partidos políticos, alertó Transparency International (TI), que pidió a los Gobiernos que pongan todos los medios para combatir la corrupción política.
En un informe presentado en París, la organización no gubernamental -única en el mundo que se dedica en exclusiva a la lucha contra la corrupción- denunció que para la opinión pública mundial la corrupción política es un "problema serio" que supera a la de las empresas y la vida privada.
Los partidos políticos obtienen la peor consideración en 36 de los 64 países encuestados en el Barómetro Global sobre la Corrupción de TI, publicado en el primer Día Internacional Contra la Corrupción declarado por la ONU.
Tras los partidos políticos, las instituciones más corruptas del mundo son los parlamentos, la policía y el poder judicial, según el informe de TI, basado en las opiniones de 50,000 personas encuestadas por "Gallup international".
Con una puntuación media de 4 puntos en una escala máxima de 5 para las instituciones más corruptas, los partidos son las instituciones peor situadas en seis de cada diez países.
Ecuador encabeza la lista de las naciones con los políticos más corruptos para sus ciudadanos, con 4.9 puntos, seguido de Argentina, Perú e India (4.6) y de Bolivia, Brasil, Costa Rica y México (4.5).
Destaca asimismo el alto grado de corrupción política en países como Francia (4.1), Polonia (4.2) y Ucrania (4.3).
También en España la principal corrupción es la política (3.8), por delante de la de los medios de comunicación (3.6), las empresas (3.5) y el poder judicial (3.4).
Durante toda la jornada, en consonancia con la celebración del I Día Internacional contra la Corrupción, las secciones nacionales de TI presionarán a los Gobiernos y Parlamentos de los países para que ratifiquen el Convenio de Naciones Unidas contra esa lacra.
En todo el mundo, la cifra de quienes han pagado sobornos supera el 10%, mientras que en la Unión Europea son los griegos los que pagaron más sobornos en el último año, con un 11%.
Además, la corrupción es una lacra que afecta, sobre todo, a los sectores más pobres: el 50% de los encuestados con bajos ingresos considera los actos menores de corrupción como un "gran problema", un porcentaje que se reduce al 38% en el caso de los sondeados con altos ingresos.