Solidardad|La Casa del Niño requiere de apoyos de la comunidad
EL SIGLO DE TORREÓN
La manutención por pequeño asciende a mil 500 pesos
TORREÓN, COAH.- En la entrada hay unas letras en lustrina de colores que reúnen la palabra ?Bienvenidos? e invitan a pasar. Las puertas están abiertas y nadie las vigila, pues asegura la directora, los pequeños que viven dentro de la Casa del Niño están contentos y no buscan escapar.
Las 80 caritas sonrientes que se encuentran en el lugar fueron alguna vez niños desamparados, con escasos recursos o maltratados, a los que se retiró de la calle para resguardarlos en este sitio que les ofrece amor y comprensión, pero sobre todo, atención.
?Muchos de los niños vienen de familias desintegradas y malfundadas, donde la madre tiene que trabajar, el niño se queda solo y no va a la escuela por quedarse en la calle e ir a las maquinitas?, dice Irma Luna de Gómez, directora de la Casa del Niño, ?aquí nos aseguramos que asista a sus clases, haga las tareas, coma, se divierta sanamente?.
Los pequeños vivían expuestos a situaciones que ponían en peligro su dignidad e integridad; hoy conviven con otros niños con experiencias similares pero comparten una nueva formación, a través del cariño, que algunos no lograban tener en sus casas, obtienen herramientas para integrarse a la sociedad lagunera.
La formación también abarca a los padres de familia, con la intención de que sean capaces de brindar a sus hijos la protección y amor que necesitan, que los valoren y entiendan para que así juntos reconstruyan su hogar.
Los niños tienen talleres de música, catecismo, baile, karate, manualidades, deportes, tareas, computación y asisten a la escuela por las tardes. Además, se les alimenta y viste. Arriban los domingos por la tarde, permanecen toda la semana en la Casa y sus madres los recogen el viernes después de la escuela, para pasar el fin de semana en familia.
?Para que ellos puedan manifestar amor necesitan contar con una experiencia de amor?, refiere Sergio de la Peña Cortés, presidente del patronato, ?aquí se tiene la esperanza de que, tras permanecer aquí, el niño pueda después generar una familia integrada?.
Las edades varían de los cuatro a los 12 años, la formación termina cuando salen de primaria, pero los directivos consideran que este rango es precisamente cuando requieren mayor atención personalizada y cuidados, donde se sientan las bases para que puedan reaccionar frente a los vicios y demás situaciones de peligro que se presenten.
?Queremos invitar a la población lagunera a que apoye la Casa porque hay muchos niños que no han podido entrar porque los recursos son muy limitados?, comenta Irma Luna. El gasto por pequeño asciende a mil 500 pesos.
A partir del primero de noviembre, la campaña del redondeo del Grupo Soriana estará dirigida a recaudar recursos económicos para dar albergue a más niños, pues aunque de momento hay 80 infantes, se cuenta con espacio para 180, pero no se cuenta con los insumos necesarios para invitar a más pequeños.
HISTORIA DEL ALBERGUE
La Casa del Niño nació en 1910 como un albergue para niños y adultos que se quedaron sin hogar, luego de las batallas de la Revolución Mexicana.
-La Cámara Nacional de Comercio (Canaco) se encargaba del lugar y en 1943 cambió el giro para atender las necesidades de albergue, alimentación y atención psicológica de los niños desamparados por sus padres, de escasos recursos o maltratados.
-En 1983 se trasladó a su actual dirección, en calle Huachichiles número 1000 en el fraccionamiento El Tajito y se dejó en manos de un patronato.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón