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Yasser Arafat en coma

Recibe el Presidente la visita de Jacques Chirac quie le expresó sus mejores deseos.

AP y El País

PARÍS, FRANCIA.- El líder palestino Yasser Arafat se encuentra en estado de coma un día después de que fue trasladado de urgencia a una unidad de cuidados intensivos, dijo ayer un funcionario palestino.

En Jerusalén, una fuente allegada al liderazgo palestino admitió que Arafat, de 75 años de edad, está ?muy, muy grave?.

La fuente, que habló a condición de anonimato, dijo que los funcionarios palestinos que acompañan a Arafat en el hospital en Francia están informando al liderazgo palestino en Cisjordania sobre la condición del dirigente.

Poco antes de las 18.00 locales (16.00 GMT), el médico jefe del servicio sanitario del Ejército francés, el general Christian Estripeau, afirmó que Arafat ?no ha muerto?, en un escueto comunicado leído ante el hospital y carente de precisión sobre el estado del paciente, de 75 años.

Menos de una hora después, fuentes médicas francesas indicaban a medios locales que el líder palestino estaba en un estado de ?muerte cerebral?, sumido en el nivel más profundo de coma (el nivel IV), en el que puede ser mantenido durante días o semanas por medios artificiales.

Sin embargo, dos allegados de Arafat habían negado previamente que estuviera en coma y las autoridades hospitalarias y militares no efectuaron más declaraciones sobre la salud del líder palestino.

En la tarde, el presidente francés Jacques Chirac acudió al hospital Percy, donde permanece internado Arafat desde el viernes pasado.

Chirac llegó en una caravana de varios vehículos, pero no habló con la prensa.

Su oficina dijo que ?vio a Yasser Arafat y a su esposa, a quienes les expresó sus mejores deseos?. Chirac también se reunió con funcionarios de la Autoridad Palestina y con médicos ?que están haciendo todo lo posible por la salud del Presidente?, de acuerdo con un comunicado difundido por su oficina.

El dirigente palestino fue trasladado desde Cisjordania al hospital militar Percy, de las afueras de París, el viernes. Desde entonces su condición ha sido un misterio y funcionarios palestinos han emitido informes contradictorios sobre su salud.

El jueves, el canal de televisión francés LCI citó a una fuente médica anónima que dijo que Arafat se encontraba en un ?coma irreversible? y ?entubado?, un proceso por el que en general el paciente está conectado a un respirador.

Una fuente palestina con acceso al equipo médico que lo atiende, dijo que el dirigente palestino estaba en coma. No aclaró, sin embargo, cuándo perdió la conciencia.

Pero Mohammed Rashid, consejero financiero de Arafat, negó rotundamente que el dirigente esté en estado de coma.

?El miércoles se realizaron varios exámenes de sangre y de la médula ósea que requerían que el Presidente estuviera en una unidad aislada durante algunas horas, y no es cierto, ninguno de los informes indican que está en coma?, expresó Rashid.

Mientras tanto, en la ciudad cisjordana de Ramallah, importantes funcionarios palestinos se reunieron de emergencia después de enterarse que la salud de Arafat se había deteriorado, dijo Sajer Habash, miembro del Comité Central del gobernante movimiento Fatah.

Los medios israelíes, citando fuentes de inteligencia de su país, dijeron que algún órgano de Arafat se había atrofiado y que el dirigente había perdido la conciencia varias veces. El diario Maariv señaló que la salud del líder palestino era ?muy grave?.

No obstante, algunos importantes allegados de Arafat negaron que su estado de salud haya empeorado y acusaron a Israel de difundir rumores.

?Estos informes infundados no proceden de los equipos médicos franceses, son filtraciones de los israelíes?, manifestó Mohammed Dahlan, ex jefe de seguridad palestino.

?Filtrar esos rumores sólo complicará las cosas y también complicará la situación entre el público palestino?, declaró a la prensa en París.

Conscientes de la ansiedad existente entre los palestinos al pensar en un futuro sin Arafat -que ha liderado a su pueblo durante 40 años sin designar a un sucesor- habían indicado previamente que su salud mejoraba y se le efectuaban más exámenes.

Jaled Salem, el consejero más importante de Arafat, dijo ayer temprano que los análisis médicos se estaban ?profundizando un poquito?, pero confió en una recuperación del líder palestino.

?No hay retrocesos?, dijo a la prensa afuera del hospital. ?No es un secreto que está enfermo, por eso está en Francia, pero no existen amenazas, no está en peligro, no hay un deterioro grave? de su salud, declaró.

Sin embargo, importantes funcionarios de seguridad de Israel se reunieron ayer mismo para analizar las repercusiones que tendría la muerte de Arafat, dijeron fuentes israelíes que pidieron mantener sus nombres en el anonimato.

Las autoridades de seguridad, entre ellas el ministro de Defensa Shaul Mofaz y el jefe del Ejército, el teniente general Moshe Yaalon, focalizaban su encuentro semanal en los informes de la salud de Arafat, manifestaron los informantes.

En Israel se especulaba que Arafat tenía una infección viral o un cáncer de estómago. Los médicos franceses dijeron que los exámenes iniciales habían descartado la leucemia, pero aportaron escasos detalles.

DA BUSH EL PÉSAME

El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, se atrevió a dar el pésame por la muerte del líder de la Autoridad Nacional Palestina, Yasser Arafat, mientras desde el hospital militar en el que estaba ingresado en París se negaba ese extremo. ?Mi primera reacción es que Dios bendiga su alma?, dijo Bush durante la primera comparecencia ante los medios tras su reelección como Presidente, asumiendo ya la muerte de Arafat.

Bush se había sumado prematuramente al pésame ya expresado por el primer ministro de Luxemburgo, Jean-Claude Junker, desde el otro lado Atlántico. En el momento en que Bush hacía pública su escueta reacción en Washington, desde Israel los servicios de información insistían en la muerte del Presidente palestino, mientras que desde el hospital militar de París se desmentía que Arafat había muerto tras el coma y sólo se reconocía que estaba en un estado muy grave, pero vivo.

Nadie le avisó a Bush de la existencia de estas informaciones contradictorias, por lo que el Presidente estadounidense añadió tras el prematuro pésame que ?seguirá trabajando? para el establecimiento de un Estado palestino ?libre? que viva ?en paz con Israel?.

La vista está puesta ahora en el cambio de tono que pueda introducir la Administración de Bush en la política hacia Oriente Medio. EU se había negado a negociar con el líder de la Autoridad Nacional Palestina -ANP- por su incapacidad para evitar las acciones terroristas contra Israel.

Bush aseguró que conseguir la paz en Oriente Medio será una prioridad de su política exterior. ?Desde que soy Presidente, siempre he trabajado por la paz en Oriente Medio. Establecí una estrategia muy esperanzadora en junio de 2002 y confío en que haremos progresos?, señaló.

Para Bush, la paz en la zona ?es una parte muy importante para un mundo pacífico?, y en este sentido apostilló que ?es importante para nuestros amigos israelíes que tengan un Estado palestino pacífico viviendo a su lado. Es importante para los palestinos tener un futuro esperanzador?.

REVISIÓN AL PROCESO DE PAZ

El fallecimiento del líder palestino, Yasser Arafat, supondría una revisión total del proceso de paz para Oriente Medio, manifestó ayer el experto Yevgueni Satanovski, presidente del Instituto ruso de Estudios de Israel y Oriente.

Si se produce el fallecimiento de Arafat, quien se encuentra ingresado en un hospital militar de París, al parecer en estado crítico, ?durante largo tiempo tendremos que olvidarnos del Estado palestino, y todos los planes, tanto para el arreglo unilateral en Gaza (en alusión al plan de Desconexión israelí) como el ?Mapa de Ruta?, serán revisados?, manifestó Satanovski a la agencia Interfax.

El experto ruso agregó que la muerte de Arafat motivaría inevitablemente una ?revisión de las políticas israelí, jordana, egipcia, europea y estadounidense en Oriente Medio?, aunque no hizo comentarios sobre la postura del Kremlin.

Según Satanovski, si fallece el presidente palestino, la situación en Oriente Medio puede evolucionar por tres cauces distintos.

El primer cauce, ?moderado?, prevé ?luchas políticas que no llegarían a una fase armada? como resultado de las cuales el lugar de Arafat lo ocuparía otro líder capaz de sustituirle al frente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).

No obstante, subrayó que entre la dirección palestina, ?hoy por hoy, no hay un líder que dé la talla, no existe un personaje que pueda convertirse en el único dirigente de Gaza y Cisjordania?.

La segunda variante, la preferible, sería que en Palestina se creara un nuevo sistema de poder dentro del cual los políticos y los dirigentes de los cuerpos de seguridad pudieran llegar al consenso en asuntos de administración, lucha contra los extremistas y las relaciones con Israel.

?Por último, la tercera versión sería una guerra de todos contra todos?, afirmó el politólogo ruso en alusión al cauce más dramático que podrían tomar los acontecimientos en esa explosiva región.

Arafat, de 75 años, símbolo y creador del nacionalismo palestino, se debate entre la vida y la muerte en un hospital militar de París a causa de una enfermedad de cuya naturaleza no se han dado apenas datos.

Según fuentes médicas francesas citadas por la emisora ?France Info?, el líder palestino se encuentra en estado de muerte cerebral y sumido en un coma ?muy profundo?.

Preparan sucesión

Dos políticos de la vieja guardia, Ahmed Korei (Abu Alá) y Mahmmoud Abas (Abu Mazen) están preparados para suceder al presidente palestino, Yasser Arafat, sin perder de vista al joven dirigente de Gaza, Mohamed Dahlán, en medio de informaciones confusas sobre la posible muerte del líder.

Según fuentes de los servicios de seguridad palestinos, la Autoridad Nacional Palestina (ANP) está realizando gestiones para trasladar a Arafat a los territorios palestinos para morir, según su última voluntad.

Según la reciente Ley Básica palestina, tras la muerte del presidente de la ANP, el presidente del Consejo Legislativo Palestino (CLP) o Parlamento se convertiría en su sucesor durante 60 días, un período en el que se prepararían elecciones presidenciales.

Rauhi Fatuh, actual presidente del CLP, es un hombre de Arafat, pero carece de talla política, por lo que se cree que las autoridades palestinas intentarán enmendar la Ley Básica para imponer una dirección -probablemente compartida por Abu Alá y Abu Mazen- con el argumento de que la situación de ocupación en los territorios palestinos no permite la celebración de los comicios.

AHMED KOREI (Abu Alá), 66 años:

Actual primer ministro de la ANP, es considerado un hombre fiel a Arafat, que además ha contado con las simpatías de líderes israelíes, pero que carece de aceptación popular.

Abu Alá nació en 1937 en la aldea Abu Dis, próxima a la ciudad vieja de Jerusalén, donde estudió contabilidad y trabajó durante 14 años como empleado de banco antes de iniciarse en la política a finales de los años setenta cuando se afilió al movimiento Al Fatah.

En 1989 fue elegido miembro del Consejo Revolucionario de Al Fatah y se convirtió en uno de los principales artífices de los Acuerdos de Oslo en 1993.

Desde que se estableció la Autoridad Nacional Palestina (1996), Abu Alá ocupó las carteras de Economía y Comercio, e Industria en el Gabinete encabezado por Arafat.

Asimismo, en 1996, Abu Alá fue elegido portavoz de la Consejo Legislativo Palestino (CLP) tras concurrir a las elecciones generales celebradas en los territorios palestinos y en las que representó al distrito de Jerusalén.

En los últimos años Abu Alá ha participado en varias reuniones con israelíes como en las negociaciones de Sharm al Sheij (octubre de 2000), Taba (enero de 2001), o la Cumbre de Akaba (junio de 2003), en la que se consagró el ?Mapa de Ruta?, el último plan de paz para la zona.

MAHMUD ABAS (Abu Mazen), 69 años:

Presentó su dimisión como primer ministro el seis de septiembre de 2003 tras cuatro meses en el cargo y no lograr concesiones de Israel, además de divergencias con Arafat.

Abas fue uno de los principales impulsores de los acuerdos de Oslo, y quien acompañó a Yasser Arafat a la Casa Blanca para firmar la Declaración de Principios en 1993 por parte de la OLP.

Como principal artífice de ese tratado y por sus extensos contactos con la izquierda israelí se ha ganado la reputación de ?moderado? en la OLP.

Abas es respetado por los líderes de la OLP y de la ANP por ser uno de los más antiguos activistas del movimiento nacionalista palestino como fundador en 1965 de Al Fatah, principal partido de la OLP.

Sin embargo, entre las facciones de la oposición como Hamas y el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) y para el palestino de a pie, Abu Mazen no goza del estatus de símbolo del que disfruta Arafat y carece de credibilidad al ser visto como demasiado conciliador con Israel.

Nació en 1935 en la ciudad de Safed, que hoy en día se encuentra en el norte de Israel.

En 1948, durante la primera guerra árabe-israelí, que resultó en la creación del Estado judío, se vio obligado escapar a Siria, donde vivió con su familia como refugiado palestino.

En 1969 ingresó en el Consejo Nacional Palestino, el principal organismo de la OLP y pasó a ser miembro del Comité Ejecutivo, el máximo cuerpo de esa organización, en 1981.

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