BANDERAZO DE SALIDA.- Cuando se preguntó a la periodista Oriana Fallaci, considerada la mejor reportera del mundo, a qué personajes le hubiera gustado entrevistar, respondió: Me hubiera gustado hablar con Eva y Adán. Los pongo en primer lugar porque todo empezó con esos dos irresponsables... También hablaría con Jesucristo, y lo haría con todo respeto. Estoy seguro que Judas, que era inteligente y culto, podría decir mucho del Maestro. A judas la historia lo ha ofendido bastante... También me gustaría haber entrevistado a Alejandro el Magno, que fue un loco maravilloso y que al parecer escapó de alguna clínica siquiátrica. Me gustaría preguntarle cómo hizo para no ser capturado otra vez.
CURVA PELIGROSA.- No dudo en poner en la lista a Homero y a Shakespeare. Son los que prefiero como escritores, junto con los autores de la Biblia. Al entrevistar a estos últimos me aseguraría de que son reales, y les pediría sus papeles de identidad, actas de nacimiento y pasaporte. Y también algunos secretos sobre la técnica de escribir y crear argumentos y personajes... No puedo ignorar a Salomón, que escribió El Cantar de los Cantares, y a esa inteligente y aventurera mujer llamada la Reina de Saba.
RECTA FINAL.- Tampoco puedo ignorar a Hitler, agrega la Fallaci, para saber algunas cosas de él que me desconciertan. Por ejemplo, lo de su homosexualidad, ¿qué hizo entonces con Eva Braun? Pero si entrevisto a Hitler, no sería honrado no hacerlos también con Napoleón. En nombre de la ?Libertad, Igualdad y Fraternidad? ese sanguinario hipócrita fue el peor dictador y el conquistador más despiadado. Al igual que Hitler y Goering, Napoleón mató y ejecutó a quienes se le oponían, y robó obras de arte. Fíjense en todas esas estatuas etruscas que robó de Florencia. Le preguntaría a ese canalla dónde están.
META.- Como feminista, debo mencionar a Juana de Arco, que junto con Isabel I de Inglaterra y Catalina de Rusia demostró que las mujeres no son estúpidas. Juana de Arco opacó a los hombres en el terreno que más les duele: el campo militar. Y les probó que una mujer puede ser mejor general y estratega que todos los militares de este siglo? También me hubiera gustado platicar con Lenin, pero junto a Carlos Marx. Le preguntaría al barbón de Marx cómo trataba a su esposa, y si es cierto que lo hacía como un señor feudal trata a sus vasallos, y un faraón a sus esclavos: a latigazos e insultos? Emmanuel Kant tendría que decir algo acerca de estas contradicciones. También le preguntaría a Marx por qué tenía aversión al agua y nunca se bañaba, y si no se daba cuenta que apestaba feo. Y ¿no le picaban esas horribles barbas?
