La inversión total fue de 33 millones de pesos
EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Lo que sería “un prototipo modelo en el país, en materia de atención a menores infractores”, el edificio del Centro de Orientación y Observación de Menores Infractores (COOMI), con un costo de más de 33 millones de pesos y a un año de su culminación, se ha convertido en un “elefante blanco” porque el actual Gobierno del Estado considera que no se justifica su funcionamiento.
El ex subsecretario de Prevención y Readaptación Social del Gobierno del Estado, Jesús Alfredo Reyes Santaella, declaró en julio del año pasado que el COOMI de esta ciudad era un prototipo modelo y la consumación de muchos esfuerzos, en alusión a las dificultades que tuvo el proyecto debido a los recortes presupuestales.
Por su parte, Juan Francisco Vázquez Novoa, actual director general de Prevención y Readaptación Social, declaró el pasado ocho de agosto que no se justifica el gasto corriente que generaría.
En esa ocasión destacó que había sólo cinco menores que requieren de ese servicio, de tal forma que para el Gobierno del Estado no es una prioridad.
El edificio se ubica en los límites de las colonias El Mezquital y Leticia Herrera de esta ciudad, en la parte posterior del Centro de Readaptación Social (Cereso) No. Dos, lugar donde circulan camiones de diferentes rutas urbanas desde el año pasado.
La construcción consta de dos edificios similares, divididos en áreas de diagnóstico y tratamiento para las mujeres y el otro para los hombres, además de la Casa de Gobierno, donde se realizarían todos los trámites administrativos.
El edificio incluye áreas verdes, deportivas, de convivencia y el auditorio donde se proyectarían eventos culturales y artísticos. Cuenta también con departamentos de Psicología, Enfermería, Médico, Trabajo Social, Farmacia y Cocina.
“Somos respetuosos del Gobierno anterior, pero esa obra viene desde la administración pasada y creemos que hubiera sido pertinente realizar un estudio, pues el gasto corriente es fuerte y consideramos conveniente una revaloración”, dijo Vázquez Novoa en la entrevista del ocho del presente.
Pese a que el subsecretario de Gobierno, Luis Felipe del Rivero Ibarra, declaró el 26 de noviembre del año pasado que en enero de 2005 podrían ingresar los primeros adolescentes al COOMI, el hecho es que hasta el momento no ha entrado en funciones.
Entrevistada ayer en sus oficinas, Claudia Bonilla Dávila, titular de la Procuraduría de la Defensa del Menor, la Mujer y la Familia, en este municipio, considera positivo que el COOMI comenzara a caminar, ya que la dependencia a su cargo contaría con el apoyo de esa institución para casos que demandaran de esa instancia.
De igual forma, agentes del Ministerio Público (MP) del fuero común, coinciden en la necesidad de la citada institución, para evitar el traslado de los menores infractores a Durango, toda vez que ello representa un problema adicional para los padres y mayores gastos.
Cecilia Sosa Moreno, agente del MP de Delitos Patrimoniales, expone que en forma continua se denuncian delitos como lesiones, daños, robos, en donde están involucrados menores de edad, lo que habla de la necesidad de una instancia como el COOMI para que los infractores reciban atención especializada que permita su rehabilitación social en forma integral.
De igual forma, Adriana Samaniego, agente del MP, informa que en todas las Agencias de la Subprocuraduría se presentan casos de menores infractores y coincide con las otras entrevistadas, en el sentido de la necesidad del COOMI en esta ciudad.
El mundo de al revés
La directora del COOMI, Ivonne Patricia Elizalde Peraza, dice que en la actualidad se dedica a recabar información para conocer las estadísticas en los últimos cuatro años, sobre los casos de menores infractores, en atención a las órdenes giradas por el Gobierno del Estado. Es decir, primero se construyó, se inauguró y luego se ordenan los estudios para determinar si es necesario o no.
Elizalde Peraza, quien recibió el nombramiento desde noviembre del año pasado, enfatiza que el inmueble ya está en condiciones de entrar en operaciones al 100 por ciento, pero mientras eso sucede, se ha dedicado a establecer convenios por organismos civiles y la Secretaría de Educación Pública, a fin de realizar un trabajo de equipo más efectivo.
“Pienso que sí se justifica el COOMI, pero eso lo van a determinar en Durango y vamos a esperar que autoricen las plazas que necesitamos. Considero que con unas 40 personas se podría empezar y ya después dependería de la demanda”, dice al final la directora.