Redoblan vigilancia policíaca durante los fines de semana en urbes vecinas a la capital
La ingesta de bebidas embriagantes en la vía pública, es la falta más común que se suscita en los poblados aledaños a la ciudad de Durango, las riñas colectivas también se dan, pero en menor frecuencia, aseguró el subdirector de la Policía Preventiva, Juan Rafael Rosales Sida.
La presencia policíaca en los poblado, ha provocado que los habitantes de los mismos se hayan visto sorprendidos al ser remitidos por consumir bebidas alcohólicas en las calles, pues prácticamente, para ellos era una costumbre que pensaban que no estaba tipificada como falta administrativa.
Durante muchos años, los pobladores habían ejercido esta actividad sin que la Policía los molestara, es decir, era común que durante los fines de semana se vieran consumiendo bebidas embriagantes en las calles de los ejidos y localidades cercanas a la capital.
Al inicio de este año, la Dirección Municipal de Seguridad Pública, instaló bases permanentes de la Policía Preventiva en diferentes localidades, sobresaliendo las de José María Pino Suárez, Colonia Hidalgo, Llano Grande y Villa Montemorelos.
A decir del subdirector de la Policía Preventiva, al momento de remitir a las personas que se les sorprendía consumiendo bebidas embriagantes en la vía pública, ellos argumentaban que por que se los iban a llevar, si estaban en su pueblo y ahí todos los conocían, hasta que se les explicó que es una falta administrativa y que se les tenía que detener.
?aun que las personas son más consientes en esos lugares, se siguen realizando estos actos, al pasar y llamarles la atención o decirles que se retiraran, los habitantes hacían caso y se iban a sus casas, sin embargo, como todos, hay unos que no entienden?, recalcó.
En los lugares más cercanos a la ciudad, los traemos a cualquiera de los dos delegaciones y los ponemos e disposición del juez administrativo, y ya sea con una sanción económica o cumpliendo algunas horas en las celdas, se paga la falta.
En los lugares más retirados, como en Llano Grande, dependiendo de la gravedad de la falta es como se procede en contra de los habitantes, si es leve, se lleva ante los presidentes de las juntas municipales y ellos, como autoridad de esos lugares, les otorgan una amonestación y cuando se acumulan varias, se ordenan que sean trasladados a la ciudad de Durango.
En ocasiones, los remitidos no traen el dinero suficiente para pagar la fianza, y se tienen que quedar a encerrados algunas horas en los separos, aun que este caso no se da mucho, pues en la mayoría de las veces, los amigos o familiares viene inmediatamente por ellos y pagan la multa.
Si cubre la sanción con cárcel y no ha venido nadie a sacarlo y además no tiene como regresarse a su pueblo, los detenidos son canalizados a las oficina de Trabajo Social, quienes nos hacen saber de la situación del remitido y cuando la patrulla se traslada al pueblo de donde es originario, le damos un ?raid?, para que no batalle en regresar a su casa, señaló, Rosales Sida.
El contacto con los 43 presidentes de las juntas municipales, ha sido constante y ellos, como autoridad de ese sitio, utilizan el criterio para amonestar a los que faltan al reglamento, u ordenan que sean puestos a disposición del juzgado administrativo, aseguró.
Por ultimo informó que aunque diariamente existe la presencia policíaca en los poblados, se llevan a cabo operativos los fines de semana, donde se mandan más elementos y unidades, a los diferentes poblados, especialmente si va a ver alguna fiesta en esa localidad.
remitidos
Entre las personas remitidas al inicio de fin de semana, en los diferentes poblado cercanos a la mancha urbana, se detectó alterando el orden público a Erik Bonilla Murillo, de 17 años, quien además estuvo provocando y participando en riñas, en Parras de la Fuente, informó la Dirección Municipal de Seguridad Pública.
En el poblado Dolores Hidalgo, fueron sorprendidos en plena batalla campal, José Medina Escobedo, de 14 años, Adrián Pizaña Escobedo, de 19 y Agustín Torres Cabada, de 15, quienes fueron remitidos a la delegación oriente de la Policía Preventiva.
Juan Casas Estala, de 46 años y Germán Andrade Estala de 22, ingresaron a los separos de la mencionada delegación por escandalizar e ingerir bebidas embriagantes en la vía pública, en el poblado Montes de Oca.
