Destaca gobierno israelí importantes acuerdos con los palestinos en materia de seguridad.
Jerusalén, (Notimex).- El primer ministro israelí Ariel Sharon y el presidente palestino Mahmoud Abbas se comprometieron hoy a hacer lo posible por cesar la violencia entre sus respectivos pueblos, al iniciar la histórica Cumbre de Sharm el-Sheikh en Egipto.
Los dirigentes de Israel y de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) manifestaron su cauteloso compromiso en la histórica reunión que arrancó con la intervención del anfitrión, el presidente egipcio Hosni Mubarak, y en la que también participa el rey jordano Abdullah.
En una declaración sin precedentes, Sharon dirigió un mensaje a los palestinos en el que aseguró "quiero prometer que en Israel tenemos la intención genuina de respetar su derecho a vivir de manera independiente y con dignidad".
El jefe del gobierno israelí destacó que en los últimos días se lograron acuerdos importantes con los palestinos en materia de seguridad, y subrayó sobretodo los gestos de buena voluntad que ha hecho Tel Aviv para reconstruir la confianza con sus vecinos.
Afirmó que Israel se ha comprometido a cesar sus intervenciones militares contra los palestinos en todas partes, así como a liberar a varios de sus prisioneros y a implementar el plan de retirada de la franja de Gaza, que dejó claro, fue "una iniciativa unilateral".
Enfatizó que Israel ha renunciado a varios de sus sueños y llamó a los palestinos a reaccionar de la misma manera y a hacer sacrificios en ese sentido, a fin de alcanzar una correspondencia que lleve a una paz duradera.
"En Israel hemos podido, aunque con dolor, renunciar a nuestros sueños, y sabemos que debemos hacerlo para lograr la paz. Espero que ustedes tambien sean realistas y puedan renunciar a algunas de sus ambiciones", apuntó Sharon.
Subrayó que la correspondencia del lado palestino a las medidas hasta ahora adoptadas por Israel será la única vía para lograr la implementación de un plan de paz duradero, y de que Israel cumpla los compromisos hasta ahora adoptados a nivel internacional.
"Estamos listos para cumplir los compromisos suscritos y todos los puntos que hemos acordado, lo haré con hechos y no con palabras", aseguró el primer ministro isarelí.
Confió en que este histórico acercamiento signifique el inicio de una era que pueda cimentar las bases para la paz en la región, pero dejó en claro que se trata de "una oportunidad muy frágil" y en ese sentido, llamó a no perderla por el extremismo.
Al iniciar su intervención, Sharon agradeció a Mubarak por su iniciativa para la celebración de la Cumbre, así como al rey jordano Abdullah por tomar parte en el diálogo, y felicitó al presidente de la ANP por su victoria en los comicios del pasado 9 de enero.
Sharon manifestó su confianza en que Abbas (Abu Mazen) sea la persona adecuada para guiar a los palestinos hacia la paz a través de un camino de democracia que, según dijo, "marcará un cambio en la calidad de vida de palestinos e israelíes".
Por su parte Abbas, a nombre de la ANP, afirmó "queremos renovar nuestra adherencia a las condiciones del proceso de paz y al plan internacional y a las acordadas con Israel, queremos respetar nuestras obligaciones y no escatimaremos esfuerzos para hacerlo".
"Hemos acordado con Sharon cesar todos los actos de violencia en contra de palestinos e israelíes, se encuentren donde se encuentren, a partir de este día es el inicio de una nueva era", afirmó el presidente de la ANP.
Sin embargo, enfatizó que lo acordado hasta ahora es sólo el principio de un largo camino hacia la paz, ya que, reconoció, aún hay "grandes diferencias" entre Israel y la ANP en lo que respecta a los asentamientos, el muro y la cuestión de los presos.
Afirmó, no obstante, que las posiciones de ambas partes son claras y firmes en cuanto a que hay disposición a incrementar los esfuerzos para superar los obstáculos y encontrar una solución final al largo conflicto que los ha llevado a sufrir juntos.
Aseguró que los palestinos han respondido hasta ahora de manera positiva hacia sus compromisos y destacó en ese sentido que hace apenas un mes se dirigieron a las urnas para participar en un proceso democrático en la búsqueda de una paz justa.
"Ha llegado el momento de que nuestro pueblo pueda disfrutar de la paz y de su derecho a vivir una vida normal, como cualquier otro.
Esperamos que ese día llegue cuanto antes y que la negociación reemplace a las balas y a los cañones", dijo.
Abbas destacó la responsabilidad de la comunidad internacional en este proceso, y confió en que Egipto y Jordania continúen ese esfuerzo, al igual que el llamado Cuarteto, conformado por Estados Unidos, Rusia, Naciones Unidas y la Unión Europea.
El líder palestino manifestó su gratitud a Mubarak por celebrar esta reunión y le instó a continuar su papel mediador en el proceso de paz en la región, al tiempo que agradeció la asistencia del rey jordano Abdullah en este diálogo con Israel.
Por su parte Mubarak, en su discurso inaugural, reconoció el espíritu positivo que han manifestado en los últimos días Israel y la ANP para trabajar de manera seria y comprometida en la adopción de medidas adecuadas para revivir la confianza mutua y alcanzar la paz.
El mandatario egipcio subrayó la necesidad de que en la nueva etapa de diálogo entre las partes se establezcan compromisos serios, determinantes y claves que, lejos de ser temporales, sean básicos para la adopción del plan de paz y poner fin al conflicto.
Señaló que el conflicto sólo terminará con el establecimiento de de dos Estados independientes que gocen de seguridad y que por ende, sean capaces de vivir en paz uno al lado de otro.
Manifestó su confianza en que el retiro israelí de la franja de Gaza y de algunas ciudades de Cisjordania se lleve a cabo de manera coordinada entre las dos partes, israelíes y palestinas, a fin de que sea un primer paso hacia la implementación del plan de paz.
Destacó la necesidad de que el pueblo palestino recupere a la brevedad posible su vida normal, y llamó a la comunidad internacional a hacer esfuerzos para ayudarles a reconstruir su economía e infraestructura.
Se refirió de manera especial al papel del Cuarteto en el proceso de paz en la región, y lo instó a continuar trabajando en ese rubro, al señalar que la estabilidad en Medio Oriente es clave para ese equilibrio en el resto del mundo.
Se desvincula Hamas
El líder del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) en Líbano, Osama Hamdan, rechazó hoy todo vínculo con el cese a la violencia declarado por el presidente palestino Mahmoud Abbas en la Cumbre de Sharm el-Sheikh en Egipto.
La reacción de Hamas, la principal facción en la lucha contra la ocupación israelí en los territorios, se produjo apenas poco después del compromiso manifestado por Abbas y el primer ministro israelí Ariel Sharon para detener la violencia entre sus respectivos pueblos.
"La conversación sobre lo que el líder de la Autoridad Palestina llamó un cese de actos de violencia no es vinculante para la resistencia porque es una posición unilateral y no fue resultado de un diálogo palestino previo", dijo Hamdan a la prensa en Beirut.
La histórica Cumbre de Sharm el-Sheikh, el primer diálogo formal entre israelíes y palestinos en cuatro años de violencia, contó con la participación del presidente egipcio Hosni Mubarak y el rey jordano Abdullah, dos de los principales mediadores del conflicto.
A la aclaración hecha por el líder de Hamas en lo relativo a la declaración de cese a la violencia, el vocero de ese grupo, Mushir al-Masri, indicó asimismo la decepción que les había producido la histórica Cumbre de Sharm el-Sheikh, según el reporte.
"La posición israelí no cambió a pesar de la buena voluntad y las iniciativas del lado palestino", afirmó al-Masri, en referencia a la negativa de Tel Aviv a emitir un acuerdo escrito y limitarse a hacerlo de formal verbal y bajo varias condiciones.
"La postura de Hamas es todavía muy clara, no hay un alto al fuego con el enemigo sionista sin un precio. Continuaremos con la calma sólo si Israel demuestra su compromiso a poner en libertad a los presos palestinos", dijo el portavoz del grupo.
En ese sentido, el vocero enfatizó que "la declaración de Abu Mazen (Abbas) representa sólo la postura de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) y no representa necesariamente la postura de las facciones, entre ellas Hamas".