AGENCIAS
TEHERÁN, IRÁN.- El principal negociador en materia nuclear de Irán dijo ayer que su Gobierno quiere resolver sus diferencias con Estados Unidos, pero advirtió que un ataque norteamericano en su contra no bastaría para destruir la capacidad nuclear del país.
?No estamos buscando tensiones con Estados Unidos?, dijo Jasan Roujani a la televisión estatal iraní. ?Buscamos resolver nuestros problemas con Estados Unidos, pero son los norteamericanos los que no quieren eso?.
Los dirigentes de Irán han tratado recientemente de reducir las crecientes tensiones con Washington, en medio de una serie de continuos enfrentamientos verbales.
El presidente estadounidense George W. Bush acusó la semana pasada a Irán de ?ser el principal patrocinador del terrorismo en el mundo?.
La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, dijo el viernes que un ataque militar contra Irán ?no está en los planes por el momento?, pero Bush no ha desechado de plano tal posibilidad, al expresar que ninguna alternativa dejará de ser tomada en cuenta.
Por su parte, El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Kamal Kharrazi, que se encuentra en Malasia en visita oficial, afirmó que su país tiene todo el derecho de poseer armamento nuclear para fines pacifistas, informó ayer la prensa local. Kharrazi, que llegó el lunes a Kuala Lumpur, aseguró que Irán hace un buen trabajo y no dejará de lado su compromiso en la tarea de desarrollar uranio enriquecido para fines pacíficos.
?Aunque la Unión Europea intente persuadirnos para que abandonemos nuestra política nuclear, estoy convencido que Europa continuará apoyando el desarrollo político y económico de Irán?, manifestó el jefe de la diplomacia iraní.
Kharrazi quitó importancia a la amenaza estadounidense de lanzar una operación militar para desmantelar instalaciones nucleares iraníes e insistió en que su país cumple con las directrices del Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA).
El ministro iraní de Asuntos Exteriores, acompañado por siete miembros de su gobierno, se encuentra en visita oficial de dos días en Malasia, de donde partirá hacia Japón.