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WASHINGTON, EU.- Estados Unidos advirtió ayer que un nuevo pacto comercial global corre peligro si no se llega la próxima semana a un borrador de un acuerdo para reducir los aranceles y subsidios agrícolas.
Ministros de Comercio de Estados Unidos, la Unión Europea (UE), Brasil e India se reunirán en Londres la próxima semana para intentar poner fin a las diferencias entre Bruselas y Washington sobre el tema agrícola.
Los bienes agrarios se convirtieron en el centro del debate, debido a que muchos países pobres que dependen de las exportaciones agrícolas aseguran que necesitan un acuerdo en ese asunto antes de continuar con otros rubros.
?Creo que si no alcanzamos eso próxima semana (...) entonces será muy difícil avanzar en el acceso al mercado en otros sectores como servicios y productos no agrícolas a tiempo para un éxito en Hong Kong?, dijo el representante de Comercio estadounidense, Rob Portman, en una audiencia en la Comisión de Agricultura de la Cámara de Representantes.
?La presion está. El reloj está sonando?, agregó. Los 148 miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC) tendrán un encuentro en diciembre en Hong Kong, fecha límite para preparar un amplio pacto global que reduzca las barreras comerciales y intente sacar de la pobreza millones de personas de todo el mundo.
Portman y el secretario de Agricultura estadounidense, Mike Johanns, dijeron a los diputados que Washington había mostrado liderazgo para intentar que las conversaciones comerciales prosperen, pero que no podía hacerlo sólo. ?Francamente, la propuesta de la UE no cumple el mandato de (la ronda comercial de) Doha y esperamos que presente una oferta de mayor acceso al mercado? agrícola, sostuvo Portman.
Johanns señaló además: ?no nos conformaremos con un paquete que no incremente el acceso real al mercado. Para ser francos, un nuevo pacto global está en riesgo a menos que Europa muestre más flexibilidad?.
La semana pasada, la UE ofreció recortar su arancel promedio a las importaciones agrícolas en cerca de un 38 por ciento, cifra insuficiente para Estados Unidos y otros países que demandaban que las disminuciones por parte de la región fueran de alrededor del 54 por ciento.
?Nunca podremos avanzar si la UE no muestra rápidamente más flexibilidad con respecto al acceso al mercado y nos ayuda a establecer un parámetro general para las negociaciones agrícolas?, señaló Portman.
?En este momento estamos sólo a seis semanas del encuentro de ministros de Hong Kong, y sin un progreso rápido en este asunto el resultado de la reunión ministerial y toda la Ronda de Doha puede estar en peligro?, agregó el funcionario estadounidense.
En un intento por destrabar las negociaciones comerciales, los principales funcionarios de la UE, Estados Unidos, Brasil, India y Australia se reunirán en Ginebra hoy para buscar acercar posiciones.
Actos de violencia serán combatidos
El Gobierno autónomo de Hong Kong ha pedido al Parlamento regional poderes especiales que le permitan combatir con fuerza cualquier acto de violencia que tenga lugar a las puertas la sexta reunión ministerial de la OMC, en diciembre.
El ejecutivo regional, que preside Donald Tsang, espera que el Consejo Legislativo aumente los poderes de la Policía de manera considerable durante esos días, publicó ayer ?The Standard?. Hong Kong no está dispuesto a que ningún activista antiglobalización ponga en peligro la celebración de la conferencia, de la que quiere servirse como escaparate internacional.
Los manifestantes que pongan en peligro ?los intereses de seguridad nacional o la seguridad pública? podrán ser encarcelados por un periodo de cinco años, según dijo un portavoz policial. ?Las manifestaciones pacíficas y legales serán autorizadas; no obstante, no toleraremos ninguna violencia durante las protestas?, manifestó recientemente el jefe de la policía, Dick Lee.
?Aquellos que vengan a Hong Kong a violar nuestras leyes, a utilizar la violencia para causar daños a nuestra propiedad o a poner en peligro las vidas de nuestros ciudadanos no serán bienvenidos?, aseguró Lee.
En principio, se espera que unos seis mil negociadores, dos mil activistas acreditados ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), tres mil periodistas y unos diez mil manifestantes se den cita en la ciudad entre el 13 y el 18 de diciembre.
Unos tres mil policías vigilarán las calles durante esa semana para evitar altercados como los que dominaron las reuniones de Seattle (1999) y Cancún (2003).
La policía argumenta que la ciudad se encuentra ante la situación de riesgo más importante de su historia.
Desde hace meses, las fuerzas del orden consideran que el riesgo de un ataque terrorista durante la celebración de la cita es ?moderado?.
Al conocer su petición, el Partido Demócrata se opuso tajantemente a ella, al denunciarla de mecanismo para ?negar los derechos humanos?.
Por su parte, representantes de los activistas de Hong Kong, unidos bajo la Alianza Popular contra la OMC, declararon que el objetivo del gobierno no es otro que el de minar los esfuerzos de su grupo.
