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MÉXICO, DF.- El esfuerzo coordinado entre el gobierno, la industria y la sociedad, es el recurso para el combate al Spam (correo basura) dado que a nivel internacional se ha mostrado que la regulación no es la mejor alternativa para controlarlo.
De acuerdo con los resultados obtenidos durante el foro "El Spam y su impacto", publicados por la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), un esfuerzo conjunto es la mejor forma de combatir los efectos nocivos de dicha práctica.
El texto señala que especialistas de empresas como esmas.com, T1msn, Mercado libre y Microsoft coincidieron en que el Spam se ha convertido en un inconveniente para las empresas serias de mercadotecnia, pues representa un peligro constante para los clientes de banca electrónica.
Indica que 75 por ciento del correo electrónico mundial es Spam, del cual 63 por ciento es producido en Estados Unidos, 21 por ciento en Asia Pacífico, 13 por ciento en Europa y tres por ciento en América del Sur.
En México, precisa, se estima que se transmiten por lo menos mil 460 millones de correos electrónicos no solicitados, lo cual podría representar pérdidas económicas por 6.5 millones de pesos al mes.
Los especialistas consideran que el correo basura se ha incrementado gracias a la escasa información en torno a las diferentes herramientas y filtros que se pueden utilizar para combatirlo.
Por otra parte, expertos de firmas como Avantel, Axtel, Symantec y Sauri, propusieron que los usuarios coloquen filtros de control y barreras para evadir el Spam, además de evitar abrir y responder correos de remitentes desconocidos.
A su vez, representantes de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) aseguraron que el Spam está ligado a prácticas comerciales fraudulentas transfonterizas, por lo que se han impulsado reformas a la ley de protección al consumidor para el uso de tecnología.
Además, se ha establecido la creación de un registro público de consumidores que no deseen que su información sea utilizada para fines publicitarios.
Otra vertiente del combate es el trabajo que la Profeco ha realizado con los países miembros de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) en la elaboración de un documento denominado "Background Paper on Spam".
