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MIAMI, FLORIDA.- Michael Moore dice que su próximo documental ya está haciendo temblar de miedo a las compañías de medicina prepaga.
Moore todavía no ha empezado a rodar su película Sicko (que se puede traducir como ?enfermo mental? o ?pervertido?), que será una crítica al sistema de salud de Estados Unidos, pero anticipándose, pero desde ya, dijo, las compañías están ?histéricas?, advirtiendo a sus empleados cómo deben actuar si el cineasta quiere hablar con ellos.
?Todavía no hemos filmado nada y ya están totalmente histéricos?, dijo Moore en la inauguración del festival cinematográfico de Traverse City. Moore, que vive cerca de aquí, fundó el festival con aficionados locales para mostrar películas de calidad.
Michael Moore dijo que una buena película es un puente sobre el abismo político para personas ?cansadas del odio, cansadas de los gritos, cansadas de... los chillidos, el periodismo radial?.
Aunque el festival no exhibe las películas de Moore sino clásicos como Casablanca, la participación de Moore motivó a un grupo conservador de Texas a auspiciar otro festival, con películas de tema conservador, previsto para comenzar el sábado.
El festival de Moore evita los temas políticos, pero él no se arrepiente de realizar filmes políticos como Fahrenheit 9/11 o Bowling for Columbine, ganador del Oscar al mejor documental en 2002.
?¿En qué momento en esta gran democracia se convirtió ?política? en una mala palabra??, se pregunta Moore.
