EFE
DAMASCO, SIRIA.- El líder sirio, Bashar Al Asad, entregó ayer al enviado de la ONU, Terje Roed-Larsen, el calendario de la retirada siria de Líbano, que, sin embargo, no se divulgará hasta la próxima semana, según fuentes de la organización internacional.
La entrega se hizo durante la entrevista que ambos celebraron en Alepo, en el norte sirio, se precisa en un comunicado que se anuncio en Beirut antes de que funcionarios de la ONU lo distribuyeran también en Damasco.
En el documento se subraya que Roed-Larsen informará del calendario al secretario general de la ONU, Koffi Annan, a su regreso a Nueva York tras concluir su gira por Oriente Medio para encauzar la aplicación de la resolución 1559, que exige la retirada siria de Líbano.
Antes de viajar a Siria el funcionario internacional había realizado escalas en Egipto, Jordania y Líbano, en busca de apoyo a los esfuerzos diplomáticos para convertir en realidad el anunciado repliegue sirio del país vecino.
El régimen de Damasco sólo había precisado -hasta ahora- que este mes retiraría sus tropas y servicios secretos hasta la Bekaa, fronteriza con Siria, pero sin especificar cuándo abandonarían definitivamente Líbano.
De acuerdo con las fuentes, Al Asad reiteró en su entrevista con Roed-Larsen que el repliegue se compone de dos fases, y que la primera de ellas incluye la repatriación a Siria antes de fin de marzo de parte del contingente en Líbano.
Según testigos, miles de soldados ya han comenzado a salir de suelo libanés, en convoyes de camiones militares cargados también de armas y pertrechos.
La fecha exacta en que el último soldado y agente sirio abandonarán Líbano no se conocerá, sin embargo, hasta que el calendario sirio no reciba el visto bueno de Annan.
Siria mantiene en Líbano alrededor de 14 mil soldados -el remanente del contingente militar que envió en 1976, durante la guerra civil libanesa-, pero se desconoce el número de agentes secretos que tiene asimismo destacados en el país de los cedros.
