Viena, (EFE).- Los primeros datos de las autopsias a los restos mortales de dos de los cuatro recién nacidos encontrados en una casa de la ciudad austríaca de Graz establecen que sobrevivieron al parto, lo que apoya la hipótesis de un infanticidio múltiple a manos de la madre.
Así lo informa la fiscalía de Graz, en el sur de la república alpina, en función de un primer informe elaborado por los médicos forenses.
La policía local informó en días pasados del hallazgo de cuatro cadáveres de bebés, dos de ellos congelados en un arcón frigorífico común en el sótano de un edificio en el que vivían varias familias.
Otro cuerpo se encontró dentro de un cubo con cemento y el cuarto debajo de escombros y trastos viejos en un inmueble cercano.
También se informó ese día de la detención de dos personas, una mujer de 32 años, la madre y principal sospechosa de los asesinatos, así como de su compañero sentimental, de 38 años, por presunta complicidad.
Los médicos forenses indican en su informe que los dos cadáveres congelados de los bebés sometidos a autopsia demuestran que estaban vivos, aunque fuese por poco tiempo, en el momento de nacer.
Los otros dos cuerpos se encuentran en tan avanzado estado de descomposición que los facultativos se muestran escépticos de que puedan obtener datos de interés, aunque se especifica que los huesos no están rotos, y, aparentemente no se ejerció violencia física externa para acabar con sus vidas.
El fiscal Peter Gruber señaló que no podía aportar más detalles, ni siquiera especificar las causas de la muerte de los bebés, para añadir que los forenses aún trabajan en el dictamen médico de la autopsia y les resta por realizar exámenes toxicológicos.
La fiscalía también aseguró que se ha ordenado realizar pruebas de ADN para especificar si el compañero sentimental de la madre, ya detenido, es el padre de los niños.
Los profesores universitarios en medicina encargados de la investigación forense, Peter Roll y Peter Grabuschnigg, relataron a la agencia de noticias austríaca APA la extrema dificultad de su trabajo, dado que los recién nacidos apenas habían desarrollado su cuerpo y las bajas temperaturas dificultaban los análisis.
Desde el viernes pasado, los cuerpos congelados se han sometido de forma continuada a cuatro grados celsius para eliminar poco a poco los efectos de las bajas temperaturas.
La detenida, empleada como contable en una gasolinera, negó haber cometido el homicidio múltiple, aunque las primeras informaciones de la policía aseguraban que había reconocido los asesinatos ante el "miedo existencial" de verse abandonada por su pareja.