EFE
TORONTO, CANADÁ.- El Festival Internacional de Cine de Toronto entra en su recta final con la proyección del filme de animación Wallace & Gromit: The Curse of the Were-Rabbit y de Mrs. Harris, que protagonizan Annette Bening y Ben Kingsley.
Las dos películas fueron elegidas por la organización para las galas de anoche, la penúltima antes de que hoy la trigésima edición del festival canadiense termine con la proyección de Edison, con Kevin Spacey, Morgan Freeman, Justin Timberlake, LL Cool J y Dylan McDermott.
Wallace & Gromit es la versión cinematográfica de una serie de cortos de animación que en los años 1990 se convirtieron en objeto de culto entre el público anglosajón. La historia se centra en un excéntrico inventor (Wallace) y su mascota Gromit, un perro extraordinariamente inteligente.
El filme ha sido dirigido de forma conjunta por el dúo británico Nick Park (que en el año 2000 realizó el largometraje también de animación Chicken Run) y Steve Box, animador de Chicken Run.
Wallace & Gromit tiene una conexión con otra película animada exhibida en el Festival de Toronto, Corpse Bride, del director Tim Burton.
Tanto en el filme británico como en el estadounidense participa, prestando su voz, la actriz Helena Bonham Carter, precisamente esposa de Burton.
Bonham Carter ha declarado en Toronto que le gusta trabajar en películas de animación.
"Filmar es tan aburrido. Hay que estar siempre esperando. A la peluquería, al maquillaje, a la cámara, a que salga el sol... Al final sólo tienes un par de minutos. Por eso podría dedicarme siempre a películas de marionetas".
La actriz también ha indicado que los guiones para películas de animación son mejores que los de los largometrajes con actores de carne y hueso.
En el caso de Corpse Bride, señaló Bonham Carter, las líneas de las marionetas "eran muy buenas. Mucho mejor de lo que normalmente se me ofrece".
En el otro extremo de las películas de animación se sitúa Mrs. Harris, dirigida por la estadounidense asentada en Londres Phyllis Nagy, un filme basado en la historia real del gurú dietario Herman Tarnower que fue asesinado por su amante, Jean Harris, en 1980.
Nagy, en contra de lo dibujado en los años 1980 por los periódicos, presenta un retrato antisensacionalista del caso y, especialmente, de Harris -quien fue acusada de ser drogadicta e inestable-, a base de presentar la cadena de eventos que terminó con la muerte de Tarnower.
Para su primer largometraje como directora, Nagy, que ha destacado como escritora de teatro y guionista en películas como The Scarlett Letter o The Talented Mr. Ripley, ha elegido al británico Ben Kingsley, siempre excelente en el papel de Tarnower, y la estadounidense Annette Bening.
Mientras, la audiencia del festival tiene una segunda oportunidad mañana de ver Iberia, la última película del director español Carlos Saura que vivió su estreno mundial el jueves por la noche ante un público entregado que aplaudió de pie al realizador y los artistas presentes al final de la proyección.
Saura señaló que la reacción del público -que se quedó en el cine más de 45 minutos tras la proyección de los títulos finales para poder conversar con el director- le resultó "inesperada".
Saura reconoció que está más acostumbrado al Festival de Cine de Montreal, donde el público es más cálido, pero que la ovación recibida por Iberia en Toronto -un certamen más enfocado a los aspectos comerciales del sector cinematográfico- fue "una gran satisfacción".
"Va a sonar un poco egoísta, pero cuando hago una película no pienso en el público. Pienso en mi propia satisfacción y en hacer lo que me gusta, jugar con la fotografía, la música, la luz, el color, los actores", explicó Saura.