La actriz está de acuerdo en que se resalte el cine latinoamericano.
EFE
SAN SEBASTIÁN, ESPAÑA.- La actriz y cineasta estadounidense Anjelica Houston, que en esta edición ejerce de presidenta del Jurado de la Sección Oficial del Festival de Cine de San Sebastián, defendió la política adoptada por el certamen de centrarse en el cine latinoamericano.
?Al haber tantos festivales es difícil encontrar buenos trabajos nuevos, y es un excelente plan dedicarse al cine latino. Desde hace cinco años hay una ?nouvelle vague? de cine asiático, pero ahora los filmes latinoamericanos vienen muy fuertes?, destacó.
Vieja conocida de este certamen que se celebra en esta ciudad del norte de España, que le concedió el Premio Donostia en 1999, año en que presentó su segundo trabajo como realizadora, Agnes Browne, con el que logró el Premio de la Juventud, Houston señaló que la ?responsabilidad? de presidir el jurado la tiene exhausta.
?Al principio tenía más energía y salía alguna noche pero, ahora sólo hago ver películas e irme a dormir al hotel?, subrayó.
Hija del mítico cineasta John Houston, Anjelica lleva 35 años en la profesión, primero como actriz y, desde hace un tiempo, compaginando la interpretación con la dirección. En ese tiempo ha visto cambiar los esquemas de Hollywood.
?Hay más películas, pero con una mayor orientación hacia el público juvenil, lo que limita el trabajo de otros artistas. Pero esa tendencia va cansando al público?, comenta durante un encuentro con un grupo de periodistas. Houston entiende que el negocio del cine es ?una mezcla de cesiones ajenas? entre los creadores y los que tienen el capital.
?Hoy -dice- las películas se concentran menos en el autor y más en el capital, pero todo el mundo responde al mercado, que es algo esencial porque nos mantiene trabajando?.
Entre su extensa filmografía, la actriz se siente más orgullosa de El Honor de los Prizzi, que rodó con su padre, ?y cambió mi camino?, al ganar un Oscar; Los Timadores, de Stephen Frears, y Delitos y Faltas, de Woody Allen. De John Houston, su mítico padre, echa de menos, dice, ?sus consejos, su inteligencia y todo en general. Hablaba con él de mi vida y era como ir con un cura al confesionario. Muchas veces no seguí sus consejos y me arrepiento, porque siempre fueron sabios, generosos y llenos de amor?.
?Siempre me sentí segura con mi padre. Él me cuidaba. Me fiaba totalmente de su ojo como artista, tenía un gusto fantástico como cineasta y un espíritu muy grande. Era un gran conocedor del ser humano?, añade Anjelica.
?La sagrada familia?
El cine chileno ofreció hoy en el Festival Internacional de Cine de San Sebastián una obra rodada en tres días, ?La sagrada familia?, en la que sus actores improvisaron, siguiendo un guión apenas esbozado que ocupaba solamente diez páginas.
Así lo explicó su director, Sebastián Campos, quien compareció con algunos de los actores después de la proyección de la película en el certamen que se celebra en esta ciudad del norte español, para agradecer los aplausos y para responder a las preguntas del público.
Los intérpretes de la película son Néstor Cantillana, Sergio Hernández, Coca Guazzini, Patricia López y Macarena Teke ?La sagrada familia?, ?opera prima? de Campos que participa en la ?Selección Horizontes? del festival, transcurre entre el viernes y el domingo de una Semana Santa en una casa a la orilla del mar, adonde una familia se traslada para pasar unos días.
La llegada de una mujer joven, bohemia, provocadora y consumidora de drogas, alienta una serie de sucesos relacionados con la espiritualidad, la religión y el sexo, que implican al padre y al hijo de la familia, a una pareja de homosexuales y a otra mujer joven.
La particularidad del filme chileno es que está rodado íntegramente con cámara al hombro, por lo que las secuencias recuerdan a las ?filmaciones caseras?, como reconoció el director.