Los cerca de 60 elementos de la Policía Ministerial, así como los 11 agentes investigadores del Ministerio Público, fueron sometidos ayer por la mañana a un sorpresivo examen antidoping en las instalaciones de la Subprocuraduría de Justicia de la Región Laguna de Durango. El antidoping fue ordenado por la Contraloría Interna de la Procuraduría de Justicia del Estado, cuyo personal llegó a temprana hora para realizarlo a los cerca de 60 elementos de la Ministerial, incluyendo al comandante Antonio García Artea. El o los efectivos que resultaran positivo en el examen, destaca, se les otorga una oportunidad y son sometidos a tratamiento para rehabilitación, pero si no quieren o cuentan con antecedentes por el mismo motivo, causan baja en forma automática.