FRANCFORT, ALEMANIA.- El árbitro que está en el centro de un escándalo que sacudió al futbol alemán porque presuntamente arregló el resultado de un partido, fue presionado para renunciar, dijeron ayer sus abogados.
Según la Asociación Alemana de Futbol (DFB, por su sigla en alemán) el árbitro Robert Hoyzer, de 25 años, renunció el viernes después de levantar sospechas por el presunto arreglo del resultado de un partido que dirigió en la Copa Alemana y sobre el cual supuestamente realizó una apuesta.
El árbitro rechazó las acusaciones y ahora sus representantes legales pusieron en tela de juicio la validez de su renuncia ante la DFB.
"Nuestro cliente fue citado en Francfort bajo un pretexto falso y enfrentó acusaciones. Después fue presionado para firmar una declaración ?para evitar un perjuicio mayor?. Ni siquiera recibió una copia", dijo en un comunicado el estudio de abogados Holthoff-Pfoertner.
Uno de los socios del estudio, Stephan Holthoff-Pfoertner, criticó duramente la forma en como trató el caso la DFB.
Como consecuencia del escándalo, la entidad rectora del futbol germano estaría buscando que de ahora en más los árbitros alemanes deban firmar un nuevo código de conducta que les prohibirá hacer apuestas sobre partidos.
Volker Roth, máximo directivo del arbitraje germano y que también preside la Comisión de Arbitraje de la UEFA, convocó a una reunión para este jueves con 42 árbitros de las dos máximas categorías para tratar ese tema.
Hoyzer está bajo sospecha de apostar por un partido de la Copa Alemana en agosto y de haber manipulado el resultado del mismo.
La DFB sospecha que Hoyzer manipuló el resultado del encuentro entre Hamburgo y SC Paderborn por la primera ronda. La federación estudia otros cinco partidos en la segunda división y las ligas regionales.
El martes se supo que la información que originó el escándalo provino de cuatro árbitros, que revelaron hace casi una semana a la DFB la información que tenían sobre Hoyzer y dijeron que actuaron para evitar un daño mayor en el futbol alemán.
