Sao Paulo, (Notimex).- Un grupo de científicos brasileños especializado en medicina robótica anunció que trabaja en el proyecto "Ciborgue", que pretende implantar en un plazo de tres años el primer brazo mecánico operado directamente por el cerebro.
El proyecto recibió un millón de dólares para su financiamiento luego del acuerdo suscrito entre el neurocientífico brasileño Miguel Nicolelis, de la estadunidense Universidad Duke, y el Hospital Sirio-Libanés de Sao Paulo.
El hospital indicó que el acuerdo prevé que el proyecto -que toma su nombre en portugués del "ciborg", un ser de ciencia ficción mitad biológico y mitad cibernético- puede recibir más recursos, en función de sus avances y necesidades.
Nicolelis, de 44 años, pretende también, a través de la organización civil Asociación Alberto Santos Dumont de Apoyo a la Investigación, crear el Instituto de Neurociencias en la ciudad de Macaíba, en el estado de Río Grande do Norte.
El instituto, además del trabajo en investigación que tendrá como principal proyecto el "Ciborgue", cumplirá una labor social y de atención médica a pacientes de la región, una de las más pobres de este país sudamericano.
El proyecto "Ciborgue" aplica una teoría matemática y tecnología de electrodos, mediante la cual se pretende alcanzar la transferencia de informaciones desde el cerebro humano para el mecanismo robótico.
La prótesis, además de buscar ayudar a personas con miembros amputados, busca también atender pacientes con problemas en el sistema nervioso y de la columna que afectan los movimientos.
Nicolelis logró en 2000 que primates movieran algunos pequeños aparatos mecánicos a través de impulsos cerebrales, pero para perfeccionar algunos movimientos precisos, como agarrar un vaso y moverlo, se necesitan más avances.
Otro problema será diseñar un procesador de datos ligero, para almacenar y codificar las órdenes del cerebro en el complejo mecanismo del brazo mecánico, que será sensible al tacto, calor, frío y otros cambios ambientales.
También se estudian la posibilidad de que la transmisión se realice a un computador, sin necesidad de que el paciente lleve siempre el procesador, y las implicaciones en el cerebro, que son analizadas en los chimpancés utilizados en los experimentos de 2000.
