Nueva York, (EFE).- Un proyecto literario a medio a camino entre la exhibición y el exhibicionismo ha llevado a tres escritores a encerrarse en minúsculos cubículos durante un mes, con la intención de escribir una novela.
La idea, puesta en marcha por el colectivo artístico Flux Factory, de Long Island (Nueva York), se inició el pasado fin de semana con el ingreso de los tres escritores en sus pequeños hábitats contiguos, de los que solo podrán salir durante 90 minutos al día, según explica en su página web.
En presencia de unos 200 espectadores, los novelistas Laurie Stone, de 58 años, Ranbir Sidhu, de 38, y Grant Bailie, de 43, iniciaron el proyecto llamado "Novela: Una Instalación Viva", que se desarrollará hasta el próximo 4 de junio.
Aunque no hay cámaras, la idea, según sus promotores, es crear una especie de "Gran Hermano" donde el público podrá acudir diariamente a las instalaciones para seguir la vida y experiencias de los participantes.
Si bien el objetivo final es escribir una obra, la propuesta del colectivo artístico va más allá, pues pretende analizar las implicaciones públicas y privadas que conlleva el ejercicio de la escritura.
Más que la humillación de no contar con intimidad o de vivir en cubículos de unos 13 metros cuadrados, los escritores se enfrentan a la peor de las pesadillas para un autor: no tener la inspiración suficiente para crear una novela antes de la fecha de entrega.
Para mayor presión, los artistas han sido citados todos los sábados, a las ocho de la noche, para leer los fragmentos escritos de sus novelas, así como para participar en dos debates públicos, programados para el 15 y el 22 de mayo.
Cada uno de los hábitats ha sido diseñado por un arquitecto que, como los propios escritores, han sido elegidos por concurso.
Con esta iniciativa, los responsables de Flux Factory han querido profundizar en una experiencia que ellos mismos conocen, pues cerca de una veintena de los artistas del grupo conviven en una especie de comuna, en un espacio de unos 700 metros cuadrados.
Este colectivo artístico se dedica, a través de todos sus proyectos, a analizar la relación y la dependencia entre la vida y el arte.
