Elche (España), (EFE).- Un hombre de 35 años fue detenido tras matar a su esposa, de 34 años, y a sus dos hijos, de seis y dos, a los que, al parecer, golpeó con un martillo en su vivienda de Elche, en la costa oriental española, informó la Policía.
Los agentes de la Policía local de Elche, en la provincia de Alicante, hallaron los tres cuerpos sin vida a primera hora de la mañana en un departamento de la localidad.
Los policías fueron alertados por un vecino que les llamó por teléfono relatando que había escuchado "un fuerte alboroto, con gritos".
Tres horas más tarde del trágico hallazgo, la Policía detuvo al esposo de la mujer y padre de los pequeños, identificado como J.M.M., como supuesto autor del triple crimen, en una calle de los alrededores de Elche.
Según las mismas fuentes, el detenido carece de antecedentes policiales y nunca había sido arrestado por malos tratos en el ámbito familiar.
Los cadáveres de la mujer y del hijo mayor se encontraban tendidos sobre la cama de la habitación del matrimonio, mientras que el del menor de 2 años estaba en el interior de una cuna, situada en otro dormitorio, indicaron fuentes próximas a la investigación, que señalaron que los agentes hallaron el martillo con el que presuntamente fueron golpeados.
La madre de la mujer asesinada sufrió una crisis nerviosa tras enterarse de lo ocurrido y fue trasladada a un centro hospitalario.
Después de, supuestamente, cometer el triple crimen, el hombre acudió con el rostro y las manos manchadas de sangre a la casa de su hermano, a quien relató lo sucedido, y, minutos después, ambos se dirigieron al domicilio donde habían ocurrido los hechos.
Al contemplar los cadáveres, el hermano empezó a increparlo e insultarlo con frases de "asesino, asesino", lo que desembocó en una pelea entre ambos "a puñetazos".
Aunque el hermano del detenido intentó evitar que huyera, éste último salió de la vivienda y recorrió varias calles próximas.
Según algunos testigos presenciales, el presunto parricida sacó dinero de un banco y compró ropa y zapatos en dos establecimientos comerciales antes de ser capturado por agentes de la Policía que previamente habían rastreado la zona.
Los tres cadáveres fueron trasladados a un tanatorio de la ciudad de Alicante, donde probablemente mañana se les practicarán las autopsias, mientras que el hombre permanece detenido en la comisaría provincial.