EFE
BOGOTÁ, COLOMBIA.- Alrededor de 760 paramilitares del bloque “Libertadores del Sur” de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) se desmovilizaron ayer en una ceremonia en el departamento de Nariño, extremo suroeste colombiano, donde realizaron operaciones en los últimos años.
El alto comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, encabezó la ceremonia de deposición de armas en una región rural próxima a la localidad de El Tablón, a unos 900 kilómetros de Bogotá, en la zona fronteriza con Ecuador.
Al mismo acto asistieron el delegado de la Organización de Estados Americanos (OEA), Sergio Caramagna, quien es inspector del proceso entre el Gobierno del presidente Álvaro Uribe y las AUC, y también el gobernador de Nariño, Eduardo Zúñiga.
Los hombres del bloque -en su mayoría- “Libertadores del Sur” serán asignados a proyectos agrícolas de palma y cacao, y también a granjas ganaderas.
Esa facción de las AUC tenía su territorio de influencia en una vasta zona sobre el litoral Pacífico de Nariño y en valles y selvas que recorre el río Mira y también en zona montañosa de varios municipios, con “brigadas” y otros frentes.
El próximo lunes, en una zona rural del municipio de San Roque, departamento de Antioquia, noroeste, se desmovilizarán más de dos mil combatientes del bloque “Héroes de Granada”, también de las AUC. A mediados de julio se desmovilizaron casi 600 hombres más en el norte del país, del frente “Héroes de los Montes de María”, que actuaban en los departamentos de Bolívar y Sucre.
Con las desmovilizaciones de los hombres de Nariño y de Antioquia, la cifra de paramilitares que abandonan las armas llegará a unos ocho mil 500, desde noviembre de 2003.
Las AUC, en virtud a los acuerdos alcanzados con el Gobierno de Uribe, han prometido que antes de concluir 2005 se habrá desmovilizado una fuerza de entre 17 mil y 19 mil de sus integrantes.
