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LA PAZ, BOLIVIA.- Desconocidos activaron hoy en Bolivia dos cartuchos de dinamita en las instalaciones de la empresa Agua del Illimani y la Prefectura de la ciudad de El Alto, lo que hace prever una convulsionada semana para el Gobierno del presidente Carlos Mesa.
El comandante departamental de la Policía boliviana, Hernán Jaimes, informó ayer que las explosiones provocaron leves daños a las fachadas de la firma y la Prefectura, aunque sin que se reportaran víctimas mortales.
Explicó que esta situación ha llevado a redoblar las medidas de seguridad para evitar atentados contra las instalaciones estatales por parte de grupos opositores al Gobierno, que exigen la promulgación de una Ley de Hidrocarburos.
Aseguró que esos artefactos fueron colocados por personas que intentan perjudicar el desarrollo de las negociaciones para la terminación del contrato con esa empresa, que incurrió en una serie de incumplimientos como el oportuno suministro.
El Grupo Especial Contra Explosivos de Bomberos, Policía Técnica Judicial (PTJ) y otras unidades realizan las investigaciones sobre el atentado dinamitero.
Las explosiones, sin embargo, no causaron destrozos de consideración en la infraestructura de Aguas del Illimani, ni daños personales.
El hecho ocurrió en momentos en que el presidente Mesa asiste en la ciudad de Santa Cruz a la Asamblea Global de la Coalición Internacional para el Acceso a la Tierra.
En esa cita, el mandatario insistió en la necesidad de buscar soluciones en paz y diálogo al problema estructural de la tierra y planteó complementar la labor del gran productor con la del mediano y pequeño empresario para generar mayores beneficios al sector.
El gobernante boliviano, quien enfrenta una ola de protestas que han puesto en jaque a su administración, aseguró que deben crearse escenarios de paz y diálogo para dar solución al problema de la tierra.
“Esta labor se hace difícil debido a actitudes intencionales de poner al país en puntos de conflicto”, advirtió el jefe de Estado, al condenar las protestas callejeras y bloqueos de carreteras.
Mesa explicó que la temática de la tierra es difícil y compleja por los sectores que involucra, sobre todo los más pobres, pero dijo que su tarea como gobernante es enfrentar este desafío, amparado en las leyes y abogando por el diálogo y la concertación.
