Retirada| Prevén reducir la presencia militar de EU en el país árabe el próximo año.
El "Ejército Islámico de Irak" aseguró, a través de un comunicado, que ha matado al rehén estadounidense secuestrado el pasado martes.
Bagdad, (EFE).- Treinta personas murieron y más de 20 resultaron heridas en un ataque suicida contra un autobús en Bagdad, el último en la oleada de violencia que azota el país y que crece según se acercan las elecciones parlamentarias del 15 de diciembre.
El nuevo atentado ocurrió hacia las 11.00 hora local (09.00 GMT) cuando un suicida hizo estallar la carga explosiva que tenía adosada al cuerpo en medio de los pasajeros del vehículo en una estación de autobuses del barrio de Al Nahda, según fuentes policiales y médicas.
"La explosión ocurrió cuando el autobús iba a salir de la estación con dirección hacia la ciudad de Naseriya", a unos 400 kilómetros al sur de la capital, dijo a EFE el capitán de Policía Salam Jatab, que no descartó que las víctimas sean en su mayoría shiies.
Según Jatab, otros cuatro autobuses quedaron dañados por el ataque, el más sangriento en Bagdad desde hace varios meses.
Las fuerzas de seguridad acordonaron toda la zona en la que se produjo el ataque, mientras que las ambulancias trasladaron a los heridos a cuatro hospitales de Bagdad.
Esa misma estación de autobuses, de la que parten vehículos para las distintas ciudades del país, sufrió un triple atentado en el que perdieron la vida más de 40 personas.
Prevén retirada
El jefe del Pentágono, Donald Rumsfeld, consideró hoy factible la posibilidad de que miles de soldados estadounidenses desplegados en Irak puedan regresar a sus casas el próximo año.
Según el secretario de Defensa, la presencia militar de EU en el país árabe, cifrada en cerca de 160 mil soldados y oficiales, podría reducirse en 2006 a unos 137 mil.
"Si las condiciones lo permiten, (el recorte) sería aún mayor", precisó Rumsfeld en declaraciones a la prensa en la sede del Capitolio, donde hoy mantuvo varias reuniones con legisladores para informarles de la marcha del conflicto iraquí.
La decisión de recortar la presencia estadounidense por debajo de los 137 mil militares, añadió, dependerá de las condiciones sobre el terreno tras las elecciones iraquíes de la próxima semana, así como de las recomendaciones de los responsables militares de EU en Irak.
El jefe del Pentágono anunció, por otro lado, que se espera un incremento de la violencia en territorio iraquí durante los próximos días, coincidiendo con la celebración del proceso electoral.
Según él, los terrorista tienen mucho que perder si las elecciones se celebran con éxito.
Anuncian muerte de rehén
El "Ejército Islámico de Irak" aseguró, a través de un comunicado, que ha matado al rehén estadounidense secuestrado el pasado martes, informaron las televisiones árabes que citaron una página de Internet.
Según las fuentes, que señalaron que no pudieron verificar la autenticidad de la nota, la organización terrorista dijo que asesinó al rehén porque el gobierno de Washington no cumplió con sus demandas.
La nota, publicada en una página web habitualmente utilizada por los grupos islamistas, no incluye pruebas que demuestren la veracidad de lo afirmado, añadieron las fuentes.
El Ejército Islámico de Irak amenazó, el pasado martes, con matar a su rehén en 48 horas si no se liberaba a todos los presos iraquíes y se compensaba a los iraquíes por las pérdidas causadas por las campañas militares en la provincia de Al Anbar, en el oeste de Irak.
El estadounidense, identificado como Ronald Schultz, fue presentado por sus captores como un "consejero de seguridad" en el ministerio de Vivienda de Irak.
Este grupo terrorista fue el que retuvo durante cuatro meses a los periodistas franceses Christian Chesnot y Georges Malbrunot, a los que acabó poniendo en libertad, aunque otros rehenes de este mismo grupo, como el italiano Enzo Baldoni, no corrieron la misma suerte y terminaron siendo asesinados.
También están amenazados de muerte cuatro trabajadores de una ONG canadiense de carácter cristiano -dos de nacionalidad canadiense, uno estadounidense y otro británico- secuestrados el 29 de noviembre y cuyo destino es una incógnita.
También en su caso sus secuestradores, un grupo hasta ahora desconocido llamado "Brigadas de las Espadas de la Ley", pedían la liberación de todos los presos iraquíes.