EL SIGLO DE TORREÓN
SALTILLO, COAH.- El Gobierno de Guatemala ya tuvo acceso al caso de la joven originaria de aquel país, Maritza Barrios, a quien tuvieron que amputarle su pierna derecha tras ser lanzada de un tren de carga en marcha, por parte de guardavías de Transportación Ferroviaria Mexicana.
El sacerdote Pedro Pantoja, coordinador de la Casa del Migrante “Belén”, dijo que representantes del Consulado de Guatemala en Monterrey incluso ya dialogaron con la inmigrante, quien se encuentra convaleciente en el Hospital Ixtlero de Ramos Arizpe.
Dijo que de acuerdo a información proporcionada a la Diócesis de Saltillo por parte del cónsul guatemalteco Felipe Camelo Schwarz, el presidente de aquel país, Óscar Berguer y el embajador en México, Manuel Soto, tienen conocimiento de los hechos ocurridos hace tres semanas.
Pantoja dijo que las autoridades guatemaltecas tienen interés de que la joven Maritza permanezca en Coahuila hasta en tanto las autoridades resuelvan la denuncia penal que se presentó por los hechos.
Como se ha venido informando, la centroamericana viajaba de manera irregular en un tren de carga propiedad de la empresa Transportación Ferroviaria Mexicana, hasta que fue sorprendida por guardias de la empresa Copssa, agencia de seguridad encargada del resguardo de las vías de TFM.
De acuerdo a las versiones que la centroamericana ha dado a conocer tanto a la prensa como al Ministerio Público, dos guardias le pidieron acceder a sus pretensiones sexuales y al negarse, la amenazaron de muerte, la trajeron colgada de uno de los vagones, hasta que finalmente la lanzaron a las vías.
Debido a las lesiones, los médicos no tuvieron más alternativa que amputarle la pierna derecha.