MIAMI, 6 (Reuters) - Puede que lo peor haya pasado para Estados Unidos y El Caribe tras la temporada de huracanes más intensa jamás registrada, pero el 2006 podría ser también un año bastante activo, según las predicciones que anunciaron los meteorólogos.
El equipo de investigación de huracanes de la Universidad del Estado de Colorado afirmó que nueve de las 17 tormentas auguradas para el 2006 podrían convertirse en huracanes atlánticos, cinco de ellos serán intensos o "considerables", con vientos que podrían sobrepasar las 110 millas por hora (177 kmh).
El grupo de expertos de la universidad está liderado por el doctor William Gray, un pionero en el cálculo de probabilidades para fenónemos meterológicos.
Los trabajos del equipo han tenido un relativo éxito en entregar pronósticos acertados en el pasado, aún cuando los anuncios que hizo hace un año para la temporada 2005 se alejaron de los registros finales.
El grupo predijo que durante este año el número de tormentas llegaría a 11 y que seis de ellas se convertirían en huracanes.
La temporada resultó ser una de las más intensas de las que se tiene registro, batiendo récords al presentar 26 tormentas, superando la marca de 21 impuesta en 1933.
Catorce tormentas tomaron la fuerza de huracanes, incluyendo Epsilón, que continúa su paso por el Atlántico con vientos que avanzan hacia el suroeste de Islas Azores a 75 millas por hora (120 kph) el martes, justo cuando la temporada finaliza oficialmente.
Katrina se convirtió en el huracán más costoso en los récords al arrasar la ciudad de Nueva Orleans y el golfo costero de Estados Unidos en agosto, causando la muerte de al menos mil 300 personas y provocando pérdidas calculadas en unos 80 mil millones de dólares en daños.
Una temporada promedio produce 9.6 tormentas, de las cuales 5.9 se convierten en huracanes y 2.3 de ellos son intensos o considerables.
La universidad dijo que el 2006 podría sobrepasar nuevamente el número promedio de fenómenos meteorológicos.
La posibilidad de que la costa estadunidense enfrente huracanes de categorías 3, 4 ó 5, los tipos más destructivos, llega a un 81 por ciento, dijeron los investigadores.
Los científicos afirman que la cuenca del Atlántico Caribe se encuentra bajo un período de crecimiento de la actividad de huracanes, pero la universidad asegura que en los próximos años no se registrarán temporadas tan intensas como las dos últimas, que en conjunto produjeron 41 tormentas.