AGENCIAS
NUEVA ORLEANS, LOUISIANA.- Miles de personas desplazadas por el huracán Katrina continuaban siendo llevadas a lugar seguro en autobuses y aeronaves ayer, dejando en el corazón de Nueva Orleans solamente a los muertos y los agonizantes, los ancianos y las personas debilitadas por días sin alimento, agua o cuidado médico.
La escena dantesca en esta otrora vibrante ciudad, de 480 mil habitantes, cobró proporciones apocalípticas con inundaciones, saqueos, violaciones e incendios provocados, para luego dejar la urbe como una tumba silenciosa, con unas pocas personas dando tumbos en las calles, mientras escuadras de paramédicos empiezan a recolectar cadáveres.
El Gobierno estadounidense enviará a 300 soldados de las Fuerzas Aéreas desplegadas en Irak y Afganistán para ayudar a sus familias en las zonas afectadas por el huracán Katrina. ?Han sido asignados para cuidar de sus familias que permanecen en casa?, relató el capitán David Small, portavoz del Mando Central de las Fuerzas Aéreas de EU en Qatar.
Small explicó que el primer grupo de soldados viajará de regreso a su país ?esta misma semana? (que en el calendario musulmán comienza el domingo) y que el resto lo hará ?tan pronto como sea posible?.
Las autoridades estadounidenses ya han confirmado que al menos 229 personas han muerto en los Estados afectados, pero se teme que sean muchos más y que la cifra aumente a medida que se recuperen más cadáveres.
En los puntos de ayuda en el Centro de Convenciones y el aeropuerto, los cuerpos sin vida son conservados en un camión con refrigeración. La mayor parte de las víctimas de la tragedia, los abandonados y olvidados, son afroamericanos. El presidente de los Estados Unidos (EU), George W. Bush enviará en los próximos días siete mil militares de tres cuerpos de élite del Ejército, algo inusual en la historia del país ya que el Ejército no interviene en asuntos internos.
Algunas de las unidades que serán despachadas a las zonas devastadas por el huracán Katrina en Louisiana y Mississippi están consideradas como fuerzas de ataque estratégica y mantienen rigurosos niveles de disposición para el combate.
La gobernadora Kathleen Blanco dijo ayer que esperaba varios miles de muertos, mientras que Craig Vanderwagen, vicealmirante del Servicio de Salubridad Pública de Estados Unidos, indicó que un solo depósito de cadáveres, el de la prisión en Saint Gabriel, espera recibir entre mil y dos mil cuerpos.
Al recorrer el centro de socorro del aeropuerto, el dirigente de la mayoría republicana en el Senado, el doctor Bill Frist, dijo que ?unas ocho o diez personas mueren diariamente?.
Tres bebés murieron en el centro de convenciones a consecuencia del calor, dijo el auxiliar médico Mark Kyle. Unos 20 mil refugiados esperaron ser rescatados durante casi una semana en el estadio Superdome, al igual que unos 25 mil en el Centro de Convenciones de Nueva Orleans. El teniente coronel Bernard McLaughlin, de la Guardia Nacional, dijo que la cifra sería en realidad de cinco mil a siete mil. La mayor parte finalmente fue transportada a lugar seguro ayer.
En el Centro de Convenciones, miles de refugiados arrastraban lo poco que les quedaba a autobuses, la mayor parte conmocionados aún por la crisis. Yolanda Sanders, quien había estado atrapada en el centro de convenciones por cinco días, tuvo que pasar entre cadáveres para llegar a los vehículos. ?Cualquier lugar es mejor que éste?, dijo.
Por su parte, el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, sobrevolará hoy, domingo, las zonas devastadas de Louisiana y Mississippi, 24 horas después de la decisión del presidente, George W. Bush, de enviar más tropas para prestar auxilio.
Rumsfeld estará acompañado en su gira por el jefe del Alto Estado Mayor Conjunto, el general Richard Myers. Se prevé que también la secretaria de Estado de EU, Condoleezza Rice, sobrevuele la zona.
