EL UNIVERSAL-AEE
LAGOS, NIGERIA.- La cifra de fallecidos por el accidente aéreo ocurrido el sábado pasado en Nigeria aumentó a 107 tras fallecer cuatro de los siete sobrevivientes hospitalizados, confirmaron medios locales.
Los cuatro heridos, que habían sufrido quemaduras graves, murieron en el hospital de la ciudad petrolera de Port Harcourt, en el sur del país, en cuyo aeropuerto ocurrió la tragedia.
El DC-9 que cubría el vuelo 1145 de la aerolínea nigeriana Sosoliso entre Abuya y Port Harcourt estalló cuando procedía a aterrizar en torno a las 14:00 horas del sábado (13:00 (Tiempo del Meridiano de Greenwich GMT, por sus siglas en inglés).
Muchos de los cuerpos de los 110 ocupantes del aparato quedaron tan incinerados que no se les podía reconocer, informaron algunas emisoras de radio.
Unos cincuenta pasajeros eran jóvenes estudiantes de secundaria de un colegio jesuita de Abuya, que regresaban a sus casas por las vacaciones de Navidad.
La organización Médicos sin Fronteras, con sede en París, dijo que dos de sus empleados internacionales murieron en el avión: un francés y un estadounidense.
El pasado 22 de octubre otras 117 personas perdieron la vida tras estrellarse en la ciudad de Lisa, cerca de Lagos, un Boeing 737-200 de la aerolínea Bellview momentos después de despegar.
El presidente nigeriano, Olusegun Obasanjo, canceló la visita oficial que tenía prevista a Lisboa y ha convocado una reunión urgente con los responsables de aviación.
Investigan causas del accidente
Los investigadores trataban de determinar ayer cuál fue la causa de que un avión nigeriano se estrellara, en un siniestro que dejó al menos 107 muertos, incluidas decenas de escolares.
?La única información que tenemos ahora es que las condiciones meteorológicas eran inclementes. El Gobierno permitirá que los expertos investiguen la tragedia e identifiquen la causa?, dijo el ministro de información Frank Nweke, a la emisora estatal Radio Nigeria.
El avión McDonnell Douglas DC-9, de Sosoliso Airlines, cayó aproximadamente al mediodía del sábado, cuando se aproximaba a Port Harcourt, procedente de Abuja, la capital nigeriana.
Un funcionario de aviación, Tommy Oyelade, dijo que los investigadores habían recuperado las grabadoras de vuelo del avión, conocidas como cajas negras.