Es Indonesia la nación más afectada con 115 mil fallecidos
AP
YAKARTA, INDONESIA.- En varios países se rindió ayer un minuto de silencio en homenaje a las víctimas del maremoto en Asia, mientras el Gobierno de Indonesia informó que había aumentado la cifra de muertos por el tsunami, elevando la cantidad global de víctimas fatales por el cataclismo a más de 168 mil.
El subsecretario de Defensa de Estados Unidos Paul Wolfowitz concluyó ayer su visita a Indonesia, la nación más afectada por la tragedia. Las autoridades indicaron que la cifra de muertos se había acrecentado en cinco mil y llegaba ahora a 115 mil.
Entre tanto, el ministro de Defensa Juwono Sudarsono negó que se hubiese impuesto un lapso de tres meses para que abandonen el país los soldados extranjeros que participan en tareas humanitarias.
?Queremos enfatizar que el 26 de marzo no es el plazo final para el personal militar extranjero que participa en las tareas de asistencia?, señaló Sudarsono, tras reunirse en Yakarta con Wolfowitz.
Sus comentarios fueron formulados luego que varios funcionarios indonesios, entre ellos el vicepresidente, expresaron su malestar por la cantidad de soldados extranjeros que efectúan labores de ayuda, e indicaron que esos efectivos militares deberían irse del país a más tardar a fines de marzo.
Wolfowitz, quien también efectuó una gira por la devastada costa de Sumatra, durante su visita dijo que Washington desea que Indonesia y otras naciones afectadas por el desastre se hagan cargo de todas las tareas de asistencia a la mayor brevedad posible.
A su vez, el teniente general de los marines Robert Blackman dijo que las fuerzas armadas norteamericanas reducirán drásticamente su presencia en la región en el curso de las dos semanas próximas. Blackman está encargado de coordinar la asistencia humanitaria de Estados Unidos en el sudeste asiático.
En Australia y en Nueva Zelanda, países que perdieron a numerosos ciudadanos que se hallaban de vacaciones en las playas del sur de Tailandia, se rindió un minuto de silencio en homenaje a las víctimas coincidiendo con el momento del 26 de diciembre en que se registró un sismo de magnitud 9.0 que causó un gigantesco maremoto. Sonaron las campanas de iglesias en ambos países, y las banderas flamearon a media asta.
Fotos de víctimas abarrotan los comercios
Las impactantes fotografías de las víctimas y las filmaciones de las olas gigantes arrasando los principales destinos turísticos del suroeste de Tailandia son la mercancía de moda en los comercios de la playa de Phuket.
El material a la venta incluye fotografías en color de hinchados y ennegrecidos cadáveres de turistas extranjeros y tailandeses, así como discos compactos con secuencias del tsunami (ola gigante) inundando hoteles y otros edificios, ahora reducidos a escombros.
"Cada día vendo cerca de mil fotografías", apuntó el tendero de un puesto callejero de la popular playa de Patong, en la que unas 300 personas perdieron la vida y donde el negocio del turismo está por los suelos.
Entre los que se acercan al puesto a comprar fotografías o discos compactos abundan más los turistas occidentales y asiáticos, aunque también, de tanto en tanto, son tailandeses quienes se interesan por la mercancía.
"Todos quieren un recuerdo del tsunami", añadió el tendero, que dijo llamarse Cop, después de vender una decena de fotografías a un turista inglés, a veinte bat (medio dólar ó 40 céntimos de euro) cada una.
