EL SIGLO DE TORREÓN
VIESCA, COAH.- Todavía no es identificado el asaltante que murió en su último atraco, luego de ser abatido por un presunto Defensa Rural, que protegía a un empleado de la Distribuidora Conasupo (Diconsa) en las inmediaciones del ejido Flor de Mayo.
Gerardo Torres Carrillo, delegado de la Procuraduría General de Justicia del Estado, informó que el agente del Ministerio Público, junto con personal de Servicios Periciales, regresaron al lugar de los hechos para recabar pruebas.
El funcionario dijo que se investiga el homicidio del tipo no identificado y que será mediante la integración de la averiguación previa, como se podrá establecer si la muerte fue en legítima defensa o hubo exceso en la misma.
Las primeras diligencias contaron la declaración de Sergio Treviño Morales, empleado de Diconsa, empresa que no ha establecido el monto del efectivo que tenía en su poder. Fidel Díaz González, escolta y defensa rural, todavía no se presenta ante las autoridades.
Al cadáver se le aplicó una prueba de radiosonato para conocer si el finado realizó disparos de arma de fuego con la pistola calibre 25, que tenía en su poder, al momento de los hechos y que en información preliminar de este medio, se asienta que alrededor de su cuerpo había nueve cartuchos percutidos.
Como se informó en su oportunidad, el fallido asalto se registró aproximadamente a las 17:00 horas cuando tres hombres que portaban armas de fuego tipo escuadra que viajaban a bordo de una camioneta pick up, color café, interceptaron el vehículo del cobrador de la empresa Diconsa.
Díaz González había bajado del auto para tocar la puerta de la casa de la encargada de un negocio en el poblado y Treviño Morales fue encañonado por un sujeto desconocido. Después se escucharon disparos y el defensa rural subió al auto, ordenando que arrancaran, puesto que le había dado a uno.
El cobrador dijo que sólo por el espejo retrovisor alcanzó a ver a otras personas, y después escuchó lo que calificó como una balacera, para luego ponerse a salvo.
Una herida producida por proyectil de arma de fuego, al parecer calibre 45, alojada en el costado derecho a la altura del tórax, sin orificio de salida, causó la muerte del desconocido ladrón, de aproximadamente 45 años de edad.
Son los agentes comisionados a Matamoros, los encargados de agotar las diligencias para esclarecer el crimen, considerando que posiblemente, la banda de asaltantes, forma parte de las gavillas que en ocasiones acechan a los fuereños que tienen que transitar por la citada comunidad.
