El plan ha tenido buena aceptación de europeos y asiáticos.
El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- Leandro García Menéndez, director de Fundación Valenciaport, señala que el proyecto Zona de Conectividad ha ido madurado y ha despertado un mayor interés de parte de inversionistas extranjeros.
Sin concluir aún los estudios para determinar hacia que sectores productivos estarán dirigidos los servicios, el directivo expresa que el plan ha tenido una buena aceptación por parte de inversionistas europeos y asiáticos, los cuales bien podrían convertirlo en su centro de distribución hacia el mercado de Estados Unidos.
Relata que en octubre de 2004 se signo el convenio de colaboración entre empresarios promotores de Durango, autoridad portuaria de Valencia y la Fundación Valenciaport, los cuales pactaron dar algunos meses para realizar el plan de negocios.
Indica que su vista a esta ciudad es por este motivo, dado que han pasado esos meses ya se tiene bien definida la arquitectura de ese plan de negocio, mismo que se desarrollaría en los próximos seis meses del año.
Definida como Zona de Actividad Logística, el entrevistado explica que debido a las características propias del proyecto se deben asegurar dos puntos: identificar el nicho y las oportunidades de negocio logístico, aprovechando tanto la producción mexicana junto con los productos asiáticos y europeos que tienen necesidades de logística para atacar el mercado americano.
Actualmente los especialistas españoles trabajan en detectar los sectores productivos, costos y requerimientos que se necesitan para poner en marcha esta Zona de Conectividad. Sin embargo, de manera simultánea trabajan en la identificación de inversionistas potenciales, así como aquellos empresarios locales que requieren los servicios de logística para hacer negocio.
Eduardo Holguín, accionista de la Zona de Conectividad, declara que debido a que se compite en un mercado global hay una amplia posibilidad que se trabaje con inversionistas locales como foráneos, tanto de España, París y China, entre otros más.
Leandro García hace referencia que la producción asiática es muy competitiva en precio, sin embargo, con necesidades de reorientar su distribución y comercialización. La inversión podría alcanzar en una primera etapa 80 millones de dólares, de los cuales 35 millones corresponden a 300 hectáreas de terreno, ubicados en El Vergel.
Sin negar que existen proyectos similares, pero encaminados al mercado interno en San Luis Potosí y Guanajuato, el especialista comenta que la Zona de Conectividad tendrá una vocación exportadora al mercado de Estados Unidos, con flujos de productos de Asia y Europa.
Eduardo Holguín declara que la viabilidad del proyecto no esta en duda, ya que es probable que empresas de europeas y asiáticas tomen la decisión de convertirlo en un centro de distribución, generando con ello un efecto multiplicador en empleos y derrama económica, una nueva etapa de servicios y una mayor demanda de mano de obra calificada, especializada en tecnologías de información.
